El papa Francisco proclamó santos a Juan XXIII y Juan Pablo II ante una multitud estimada en un millón de peregrinos reunidos de la plaza de San Pedro, a cuya ceremonia asistió Benedicto XVI en una jornada histórica de "cuatro papas".
La primera ceremonia simultánea de canonización de dos papas en la historia de la Iglesia fue concelebrada por 150 cardenales, mil obispos y seis mil sacerdotes, y asistieron delegaciones oficiales de 92 países, entre ellas el canciller Héctor Timerman representó al gobierno argentino y el titular de la cámara de diputados Julián Domínguez.
"Declaramos y definimos a los beatos Juan XXIII y Juan Pablo II santos y los inscribimos en el Catálogo de los Santos, y establecemos que en toda la Iglesia sean devotamente honrados entre los santos", pronunció el Papa en latín la formula de canonización.
Los peregrinos, muchos argentinos, brasileños y polacos que se distinguían por sus banderas, estallaron en un cerrado aplauso y vivas a los santos papas, cuyas imágenes estaban desplegadas en dos tapices colgados de la basílica de San Pedro. De la liturgia participaron también la costarricense Floribeth Mora, quien en un momento acercó reliquias de Juan Pablo II al altar, y la monja francesa Marie Simon Pierre, cuyas curaciones milagrosas se le atribuyen a Karol Wojtyla.
"San Juan XXIII y San Juan Pablo II tuvieron el valor de mirar las heridas de Jesús, de tocar sus manos llagadas y su costado traspasado, porque en cada persona que sufría veían a Jesús. Fueron dos hombres valientes, llenos del Espíritu Santo, y dieron testimonio ante la Iglesia y el mundo de la bondad de Dios, de su misericordia", dijo Francisco sobre sus antecesores.
El pontífice argentino definió luego a cada uno por separado. "Me gusta pensar a San Juan XXIII como el papa de la docilidad al Espíritu Santo", destacó sobre el primero. "San Juan Pablo II fue el Papa de la familia, como él mismo dijo que le gustaría ser recordado", subrayó sobre el segundo.
El Centro de Televisión Vaticano (CTV) consideró que se trató de la ceremonia de canonización más mediática de la historia, al estimar de 2.000 millones de personas siguieron este evento religioso en los cinco continentes.
Las redes sociales Facebook y Twitter también fueron la vía elegida para expresar sensaciones y opiniones sobre estos dos papas santos. "A Juan XXIII el Papa Bueno le agradecemos el estar abierto al Espíritu al convocar al Concilio Vaticano II. Cuanto bien para la Iglesia!", escribió el sacerdote argentino Javier Klajner, y agregó en otro tuit: "A Juan Pablo II agradecemos la institución de las Jornadas Mundiales de los Jóvenes, de la mano del Cardenal argentino Eduardo Pironio".
Los católicos argentinos participaron este fin de semana en Buenos Aires, Córdoba, Tucumán y otras diócesis de misas, actos y homenajes con motivo de la doble canonización.
Un asistente muy especial. El papa emérito Benedicto XVI, quien renunció al trono de Pedro en 2013, asistió vestido con la sotana blanca a la ceremonia concelebrada por 150 cardenales y mil obispos. A su llegada fue recibido por un caluroso aplauso y saludado con un abrazo especial tanto al inicio como al final de la ceremonia por Francisco, en un gesto de fraternidad.