Agencias
“¿Ustedes vieron lo que pasó en Turquía? Erdogan se va a quedar como un niño de pecho frente a lo que va a hacer la revolución bolivariana si la derecha pasa la frontera del golpismo otra vez”, dijo ayer Nicolás Maduro en un mensaje televisivo.
El presidente venezolano esgrimió así una de sus más recurrentes herramientas para defender su cuestionada legitimidad: denunciar un golpe de Estado. Varias veces apuntó a Estados Unidos, a sectores internos de las Fuerzas Armadas, al ex presidente colombiano Álvaro Uribe y hasta a una nueva “triple alianza” de Argentina, Brasil y Paraguay.
Acosado por una crisis económica gravísima, con desabastecimiento e inflación descontrolada, Maduro atacó a los sectores opositores que impulsan un referéndum revocatorio de su mandato, advirtiéndoles que ni sueñen con intentar un golpe, porque ante eso reaccionará con tanta dureza que opacará lo que sucedió en Turquía tras el fallido golpe del 15 de julio, que provocó 272 muertos.
El gobierno de Erdogan respondió al alzamiento con la detención de cerca de 26 mil simpatizantes del predicador Fethullah Gülen, a quien Ankara acusa de instigar la intentona golpista. Maduro aseguró que, en un escenario similar, pondría “orden y autoridad con la ley a nivel nunca antes visto” en Venezuela.
“No lo digo por decirlo. Estoy preparado para hacerlo, y me sabe a casabe (no me importa) lo que diga la OEA y el imperialismo norteamericano”, agregó.
Sin embargo, luego matizó sus palabras: “Quiero paz, quiero diálogo, quiero prosperidad”, dijo.
La oposición venezolana se alista para marchar hacia Caracas el 1º de septiembre, para exigir al poder electoral la fecha de recolección de los cuatro millones de firmas necesarias para convocar un referéndum revocatorio contra el presidente.
“Ya están activados en casi todo el país los comandos por el cambio”, declaró Jesús Torrealba, secretario ejecutivo de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Maduro aseguró que, en realidad, sus adversarios buscan “calentar la calle” para crear una situación de inestabilidad. “¡Atrévanse!”, advirtió el presidente venezolano.
Despidos. El jueves, el diputado chavista y primer vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, adelantó que citarán a todos los ministros del país para solicitarles que destituyan a los altos cargos opositores que se encuentren trabajando en sus instituciones.
“Vamos a citar a todos los ministros, presidentes de institutos” para entregarles “su lista de escuálidos (opositores) y en una semana los volvemos a citar para verificar que no quede ni un escuálido ahí”, dijo Cabello desde una concentración en apoyo al presidente Nicolás Maduro que se realizó en el estado de Anzoátegui (este).
Cabello dijo que no puede haber ningún opositor trabajando como jefe en una institución del Estado, “después de 17 años de revolución”.