El huracán Florence desplegó su furia en la costa atlántica de Estados Unidos, con fuertes vientos y lluvias torrenciales que dejaban varios muertos y "catastróficas" inundaciones con cientos de personas atrapadas que equipos de rescate buscaban socorrer. Hasta el momento las autoridades confirmaron siete víctimas fatales pero no descartan que ese número aumente.
La primera muerte fue en el condado costero de Pender, Carolina del Norte; luego la policía en la policía de Wilmington reveló que una madre y un bebé fallecieron cuando cayó un árbol en su casa, mientras que el padre de familia fue trasladado a un hospital local con heridas.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, confirmó que una cuarta persona murió en el condado de Lenoir mientras encendía un generador. El Director de Servicios de Emergencia del Condado de Lenoir, Roger Dail, reveló que se trataba de un hombre de 78 años de Kinston que fue electrocutado cuando intentaba conectar dos cables de extensión afuera bajo la lluvia. En ese marco, el rescatista reconoció que la quinta muerte reportada también ocurrió en Kinston, y es de un hombre de 77 años.
En ese marco, Stephen Rea, director de Servicios de Emergencia del Condado de Carteret, indicó que dos personas murieron en Harkers Island, Carolina del Norte, el viernes temprano. Con estos dos últimos decesos, el número de víctimas fatales alcanzó los siete, según consignó el sitio de noticias Abc News.
El paso de Florence. En confluencia de los ríos Neuse y Trent, con una crecida mayor a tres metros, la ciudad turística de New Bern, de unos 30.000 habitantes, sufrió inundaciones súbitas que dejaron atrapadas a centenares de personas. "En unos pocos segundos, el agua subió hasta la cintura, ahora está a la altura del hombro", explicó una mujer que debió refugiarse con tres familiares en la parte más alta de su casa.
EE.UU. se prepara para el peligroso huracán Florence
Ante estas situaciones, Cooper manifestó: "Los equipos de rescate ayudaron a centenares de personas en New Bern. Los rescatistas hacen todo lo posible para brindar asistencia a aquellos que lo necesitan".
En tanto, muchas de las zonas inundadas "son peligrosas para nuestros socorristas". Así lo indicó Jeff Byard, responsable de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), que movilizó a 1.200 personas para las operaciones de búsqueda y rescate.
Operativo. En ese marco, se desplegaron rescatistas voluntarios, como los de la organización Cajun Navy, que se trasladaron desde el estado de Luisiana, dado que prevén que Florence arroje 68 billones de litros de lluvia en una semana en Carolina del Norte, Carolina del Sur, Virginia, Georgia, Tennessee, Kentucky y Maryland.
El gobernador de Carolina del Norte indicó que cerca de 800.000 personas permanecen sin electricidad en ese estado, que tiene una población de 10 millones, y agregó que unas 21.000 personas estaban refugiadas en 157 albergues. "Nos enfrentamos a múltiples amenazas. Estamos profundamente preocupados por comunidades enteras que podrían ser barridas", completó.
Visita oficial. El presidente Donald Trump visitará las áreas afectadas "de principios a mediados de la próxima semana" cuando se determine que su viaje no interrumpirá las labores de rescate.
"El presidente tiene previsto viajar a las áreas afectadas por la tormenta a principios o a mediados de la próxima semana, una vez que esté claro que su viaje no va a entorpecer las labores de rescate", indicó la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders.
F.D.S./M.S.