A los 75 años falleció en Madrid la cantante española Concha Márquez Piquer a raíz de una infección pulmonar. Desde su entorno familiar confirmaron su muerte luego de que la noticia trascendiera en distintos medios de comunicación.
La mujer, quien fue ahijada de Eva Duarte de Perón, se encontraba internada en la clínica Quirón de esa ciudad. Fue la única hija de la tonadillera Concha Piquer y del torero Antonio Márquez, y había nacido en Buenos Aires el 31 de diciembre de 1945.
Desde chica soñaba con ser cantante, a los 14 años se enamoró del torero Curro Romero y tres años después, en octubre de 1962, se casaron y tuvieron dos hijas: Coral y Concha. Si bien él no quería que su esposa se dedicara a la canción ni al cine, a los seis años de casados accedió a que se presentara en el Teatro Calderón de Madrid.
El matrimonio se terminó en 1979, y conoció luego al actor Ramiro Oliveros, padre de su hija Iris. El año que viene, la pareja iba a celebrar sus 40 años de relación.
El día que Evita salvó a la hija de Concha Piquer al enviar un avión con vacunas a España
La carrera de la artista se pondría en pausa tras la muerte de su hija Coral en un accidente de auto, a finales de 1986. Márquez Piquer se retiró de los escenarios, para reaparecer recién en 1992 en el teatro madrileño Apolo con la obra "Madrid, Madrid", del empresario teatral José Tamayo, que la conocía desde que era niña y quien dirigió el último espectáculo de su madre.
Su madre, Concha Piquer, fue una artista de gran popularidad: triunfó en Broadway, actuó en escenarios porteños, y llegó a rodar “Me casé con una estrella” (1951), junto a Luis Sandrini y dirigida por Luis César Amadori. En su paso por Argentina, la actriz y cantante fallecida en 1990 generó polémica por su defensa de la dictadura de Francisco Franco.
Según se supo, Márquez Piquer será enterrada en la tumba donde descansan los restos de su madre, en el cementerio de San Isidro de Madrid.
Eva Duarte de Perón, la eterna abanderada de los humildes
El día que Evita salvó a Concha Márquez Piquer del tifus
En 1948, cuando “Conchín” era chica, se enfermó de tifus. La única manera de salvarla era administrándole cloromicetina, fármaco entonces en fase experimental en los Estados Unidos, que no se comercializaba aún en Europa.
En ese momento, Concha Piquer recurrió a Eva Perón por la amistad que las unía. Y en pocas horas, a través de la Embajada de Argentina en Madrid, aquel medicamento llegó al aeropuerto de Barajas en un avión especial que había ordenado enviar Evita.
La menor sobrevivió, y Concha Piquer jamás olvidó el gesto de su gran amiga. Su amistad era tan cercana que, cuando Eva y Juan Domingo Perón se casaron, lo hicieron en la casona del barrio de Belgrano que la española había alquilado y donde vivió durante cuatro años desde 1944 a 1948.
Según consignó el sitio Libertad Digital, Evita “visitaba a menudo a Concha, y ésta a su vez le devolvía el cumplido yendo a la Quinta Presidencial de Los Olivos”. A su ahijada, Evita le decía: "No te olvides de que soy para ti tu segunda madre".
Cuando el 26 de julio de 1952 murió Eva Perón, Concha Piquer se hallaba actuando con su compañía en Bogotá, e inmediatamente suspendió la función.
AG / ED