La inflexibles políticas de Covid cero del mandatario chino, Xi Jinping, más la información confusa brindada por Apple a sus empleados y los rumores crecientes de un posible experimento en la planta fueron un combo explosivo que derivó en la huida masiva de empleados sumidos en pánico. Cientos de trabajadores huyeron de la planta de Foxconn de Apple, en la ciudad de Zhengzhou.
Esto ocurrió en la línea de ensamblaje de computadoras Apple más grande del mundo. Todo comenzó cuando aparecieron casos de Covid dentro de la empresa, mientras que los jefes les aseguraban que no era así, pero contaban a los medios que no había contagios “sintomáticos”.
A raíz de esa información confusa, el temor comenzó a crecer. Un trabajador de 21 años le contó a la BBC que circularon historias y especulaciones que nadie podía detener.
La empresa ordenó a cientos de miles de empleados que no abandonaran el complejo industrial, pero la paranoia se fue incrementando. Una trabajadora, por ejemplo, escuchó que el ejército iba a tomar el control del lugar para hacer un experimento de “vivir con Covid” y que iban a permitir que todos los ciudadanos de esa ciudad se enfermaran. El objetivo sería saber cuántos morían y que, si la mortandad no era alta, podría ser la puerta para dejar atrás los confinamientos.
Cosas de este estilo circulaban en los chats grupales y el pánico se tornó irreversible. Así comenzó a gestarse una huida que ya incluye a cientos de trabajadores.
"Para ser honesta, al principio no pensé que sería tan malo", detalló otra empleada a la BBC. "Pero luego las personas a mi alrededor comenzaron a infectarse. Los casos positivos en otros dormitorios no fueron puestos en cuarentena durante varios días. Entre quienes sé que siguieron trabajando, todos comenzaron a confirmarse como positivos", relató.
La mayor parte de la ciudad de Zhengzhou se encuentra bajo algún tipo de confinamiento, por lo que las apps de salud telefónicas no permitían que nadie saliera, esto implica que nadie podía usar el transporte público ni taxis.
Debido a esto, los trabajadores de Foxconn optaron por saltar la cerca y simplemente comenzar a caminar. Algunos de ellos viajaron a pie con todo lo que pudieron cargar durante más de 100 km.
El temor por la falta de información
En China la enfermedad sigue causando el temor previo a las vacunas porque no hay información sobre lo que ocurre. Para muchos contagiarse es sinónimo de un padecimiento extremo y muerte, por eso estos trabajadores llegaron a sus lugares de origen y fueron puestos en instalaciones de cuarentena construidas apresuradamente en las escuelas secundarias locales. De acuerdo a sus temores, esto es preferible al infierno de Covid que imaginaron que les ocurriría en su fábrica.
La empresa, por su parte, anunció que quienes quieran asistir podrán hacerlo en autobuses seguros que ahora se han organizado en coordinación con otras localidades y que llevarán a las personas directamente a los sitios de cuarentena, asegurando así un proceso mucho más tranquilo y ordenado. Además, aseguró que se cuadruplicarán los bonos para el personal que permanece en el sitio y no toma vacaciones.
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