Una plaga de gusanos planos originarios de Argentina invade Francia y preocupa a los científicos. Se trata de una especie llamada Obama nungara, la cual por su alimentación a base de caracoles y lombrices, amenaza la biodiversidad local.
La especie, que no tiene ninguna relación con el expresidente norteamericano Barack Obama, es un depredador que vive de noche y si bien se mueve muy lento, prolifera a gran velocidad e invade los jardines de Francia y Europa. Los especialistas consideran que es potencialmente amenazadora biodiversidad, según un estudio publicado el jueves 6 de febrero por la revista científica PeerJ y citado por el medio francés LCI.
"Es una bonita historia que comenzó en marzo de 2013: un naturalista aficionado observa en su jardín de Cagnes-sur-Mer (Alpes Marítimos) un extraño gusano y envía su foto" detalló Jean-Lou Justine, profesor del Museo de Historia Natural de París, y uno de las encargados del estudio realizado, al referirse a los inicios de su investigación acerca de estos gusanos.
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En muchos de los informes realizados por científicos principalmente en Francia pero también en otros países como Reino Unido, España, Portugal, Bélgica, Italia y Suiza, se identificaron varias especies de gusanos, pero el "Obama nungara" parece predominar.
Características. En su mayoría estos ejemplares son de color marrón oscuro y miden de 5 a 10 centímetros. Mediante una serie de análisis moleculares, los científicos logran encontrar su origen: Argentina, donde la especie llegó través de plantas en macetas.
"Una vez que una especie está en un jardín, puede moverse muy lentamente, puede invadir el jardín vecino en unos meses", señaló Justine. En ese marco, agregó: "Este es un fenómeno clásico para las especies invasoras: su presencia es discreta al principio y solo lo notamos cuando ha invadido una parte completa del territorio".
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"Invasivo no es sinónimo de dañino: significa que la proliferación se vuelve muy visible y que es potencialmente peligroso para el ecosistema. Si es un animal depredador, necesariamente disminuirá la población de animales que él come ", completó el investigador, quien ante la consulta de cómo se puede terminar con la plaga, cerró: "No lo sabemos. Podemos aplastarlos o quemarlos, pero habrá tantos después".
F.D.S./ EA