El Kremlin admitió ayer que muy pocas personas sabían de la intención de Vladimir Putin de invadir Ucrania, al comentar una versión periodística que apuntó que ni siquiera el canciller Serghei Lavrov estaba al tanto de la amplitud del ataque que planeaba el presidente ruso.
“Este tipo de informaciones es compartida con un número muy limitado de personas, es la práctica habitual”, dijo el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, al comentar la versión del sitio periodístico de investigación Bellingcat sobre el secreto con el que Putin manejó el lanzamiento de la invasión a Ucrania.
Según un periodista de Belligcat, el búlgaro Hristo Grozev, que cita como fuente a una hija del canciller ruso, “hasta el propio Lavrov creyó hasta el final que todo sería una amenaza de guerra. Quedó shockeado al comprender que sería una auténtica guerra”.
Grozev sostiene que Lavrov se sorprendió por el hecho de que Putin haya lanzado una guerra a gran escala sin advertir a su círculo más cercano, que desde entonces no esconde su inseguridad.
“Por eso las caras que vemos en estas personas. Por eso Peskov tiene esa expresión. Es muy difícil definirlo como una persona vivaz y decir que cree en lo que dice. No hemos visto esto anes. Pero, desasfortundamente, la elite tiene miedo”, afirma el periodista.
Para Grozev, la elite rusa aún no está preparada para oponerse a Putin. “Hace poco escuchamos un diálogo en el que un oligarca cercano a Putin le decía a otro que ‘lo mejor sería que se muriera porque nos ha destruido, destruye a Ucrania, destruye a Rusia’”, revela.
“Eso es lo que piensan. Están evaluando activa o pasivamente cómo ponerle fin”, concluyó el periodista.