La Marina brasileña con el apoyo de la Fuerza Aérea de ese país, más un buque de la Armada Argentina, concentró la búsqueda de los cuatro argentinos desaparecidos en las costas de Río Grande del Sur. Por el momento no se localizó a los náufragos quienes perdieron contacto con sus familiares el martes de esta semana.
La hermana de Alejandro Vernero, uno de los cuatro náufragos, habló de las capacidades de su hermano para la navegación: "No era un improvisado. Estaba habilitado para hacer estas travesías. Eso nos ayuda mucho a pensar que lo vamos a encontrar bien", señaló Vernero en declaraciones a radio Continental y añadió que"estaba preparado" para hacer este tipo de viajes.
Ana Vernero remarcó que Alejandro llevaba un tiempo sin realizar viajes de tanta distancia pero precisó que los hombres "estaban preparados" para navegar y "tenían mucha experiencia" en excursiones de este tipo.
También detalló que en la última comunicación satelital que mantuvieron con los tripulantes, ellos explicaron que "estaban bien" y que el "barco dio un giro de 360 grados, pero volvió a su posición".
Al respecto, Vernero consideró que los navegantes "deben estar sin poder controlar el barco, pero bien".
Alejandro Vernero, cardiólogo, de 62 años; Jorge Benozzi, un prestigioso oftalmólogo de la misma edad; su yerno, Mauro Capuccio, de 35; y Horacio Morales, apodado "el Mono", de 62, partieron desde el puerto del distrito bonaerense de San Fernando rumbo a Río de Janeiro. Los cuatro se encuentran a la deriva desde el martes, cuando un fuerte temporal los atrapó navegando por alta mar.
