En una entrevista con medios brasileños previa a la llegada de Lula da Silva al país, el presidente Alberto Fernández repitió un argumento sobre la inflación que ya había utilizado en otras oportunidades.
En su visión, "hay una gran parte de la inflación que es autoconstruida, está en la cabeza de la gente; la gente ve en el diario que va a subir el combustible y entonces empieza a aumentar los precios por las dudas".
Más allá de que le llovieron críticas por intentar esa explicación, lo cierto es que la inflación no afloja. Y en algunos despachos oficiales comienzan a reconocer lo que para los consultores privados es inevitable: la inflación de enero estará por encima de la de diciembre. Tras el 4,9% de noviembre y el 5,1% de diciembre, los precios volverán a subir y encadenarán tres meses consecutivos en alza.
El problema económico está en la cabeza del Presidente
El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), publicado en los primeros días del año, pronosticó un 5,6% en promedio. Y a medida que avanzó el mes, los consultores fueron en esa línea: Analytica espera un 5,8%, EcoGo espera un 5,4% y LCG, la consultora que mide semana a semana los precios de los alimentos, detectó un salto del 1,6% en ese rubro solo durante la tercera semana de enero.
Ese último aspecto, los aumentos de los alimentos, es el que genera mayor preocupación en el Gobierno, ya que el acuerdo de Precios Justos pone un techo del 4% mensual a las subas hasta marzo. Sería una muy mala señal para el programa que en enero no pudiera sostenerse la pauta acordada entre el Gobierno y los empresarios.
JL