El periodista boliviano Juan Cristóbal Soruco Quiroga habló con Jorge Fontevecchia para Radio Perfil.
JF: Acá estamos con Jorge Elías, yo quiero preguntarte: ¿qué tamaño tiene lo que nosotros en Argentina llamamos "la grieta", una forma de denominar el exceso de polarización y su patología?
Yo creo que la polarización tiene aquí una visión algo distinta de las grietas que plantean ustedes. Yo sigo cada día lo que les está sucediendo, ustedes tienen una grieta entre dos fuerzas que son casi iguales. Acá tienes un oficialismo que ha copado todo el Estado, Justicia sobre todo, frente a una oposición que no puede articularse, entonces da manotazos de ahogado con muy buenas intenciones.
Son tantos los hierros del oficialismo que la gente anda desilusionada más que en grietas o polarización. No es uno u otro sino que ve un poder muy fuerte, hegemónico que hace uso y abuso de su poder.
Soy de los que creen que no hubo golpe de Estado en 2019, este fue un proceso en el que Evo Morales, por sus propios intereses, lo provocó. Primero, conociendo el resultado de un referendo constitucional en el que se le planteaba a la ciudadanía si se podía reformar la constitución elaborada por el MAS, para viabilizar la reelección indefinida del presidente y vicepresidente de la República. Ese referendo lo perdió el MAS pero hicieron dictar una sentencia del Tribunal Constitucional habilitando la reelección. Eso provocó el desanimo y la rebelión de los sectores más democráticos del país.
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En octubre se dio una lamentable sucesión, no solo el hombre renunció previamente a la presidencia sino que se fugó, permitiendo a la gente inmolarse por él, cosa que un sector del MAS no hizo, permitió ese traspaso político del poder en una sucesión irregular a la que resultó ser presidente del Senado porque renunciaron el presidente, el vicepresidente y los presidentes de las Cámaras.
Por los desaciertos que cometió el gobierno de transición, el MAS recuperó su mayoría, ganó las elecciones por la construcción clara del caudillo de tapar su fuga y tratar de convertir ese proceso político en un golpe de Estado. El presidente Fernández se identificó plenamente con el MAS. Hay que aclarar que Macri tuvo un distanciamiento, porque yo creo que en Argentina vieron mal este proceso.
JF: Estás haciendo una comparación muy interesante entre Argentina y Bolivia, estás hablando del MAS y aquí podemos hablar de la coalición de gobierno del Frente de Todos. Ayer hubo un cambio del jefe antinarcóticos que depende del gobierno y aparentemente hay una rencilla interna contra Evo Morales dentro del MAS. ¿Cómo podrías describir esta situación sabiendo que seguís a diario la política de la Argentina?
Si disculpamos las dimensiones, hay una similitud impresionante. El tremendo distanciamiento entre presidente Arce y el ex presidente Evo, que no aguanta no estar en el centro del escenario. Desde enero viene pidiendo un cambio de gabinete y Arce no le hace caso, se están peleando entre ellos.
Con el tema del narcotráfico han tocado una fibra muy sensible y me da la impresión de que Evo está dispuesto a sacrificar todo para volver. Tocar el tema de narcotráfico quiere decir que las cosas están llegando a un extremo muy preocupante, que nos va a afectar a todos.
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El tema retoma fuerza por el apresamiento y el pedido de extradición de Dávila, que fue jefe de la división antinarcóticos del gobierno de Evo. Con esta nueva denuncia que sale y con la declaración de ayer que dice que tiene temor por su vida quiere decir que las aguas están muy duras en ese campo. Es novedosa la forma en la que emerge.
JF: Ayer entrevistamos al director de la radio Bio Bio y él nos hablaba de la enorme influencia que tenía Álvaro García Linera en la nueva constitución que se está construyendo en Chile respecto a la autonomía de los pueblos originarios. A nosotros en la Argentina nos toca por el tema de los mapuches, en la parte centro-sur de Argentina. En el caso de Chile, habló de García Linera por el tema de los aimara en el norte de Chile, en la parte fronteriza, inclusive lo que era antes territorio de Bolivia. Dos preguntas relacionadas con García Linera: ¿usted sabe que tiene realmente influencia sobre derechos autónomos de pueblos originarios en la futura constitución chilena? ¿Cuál es la relación de Álvaro García Linera en esta pelea entre el presidente Arce y el ex presidente Evo Morales?
Es la gran incógnita, porque Álvaro García sigue viviendo en la Argentina, es profesor y colabora con la institución creada por el expresidente Correa de Ecuador, que hace encuestas en el mundo donde solo aparecen bien los amigos del socialismo del siglo XXI.
Lo que sabía yo de la relación con el presidente Boric es que Boric respetaba intelectualmente a Álvaro García Linera. Yo presumo que García Linera está con Evo, nunca se llevó bien con Arce.
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JF: En esta puja entre el presidente actual y el expresidente, ¿Quién tiene más posibilidad de triunfar?
Es una bola de cristal, hay especulación. El que tiene el poder es el que está en el Palacio de Gobierno.
JF: ¿Usted le pone fichas a Arce?
Es arriesgado decir que le pongo fichas, pero él está en el Palacio de Gobierno. El líder del MAS es Evo, sobre todo en la zona de los valles. Los aimará están con Choquehuanca, el vicepresidente, que es un personaje enigmático, el gran contrincante de Evo ya que no lo quería a Choquehuanca.