Debe señalarse con insistencia, que la generación de políticas de Estado es un elemento indispensable para una reforma de salud que trasciende el tiempo de un gobierno, los resultados requieren de periodos largos y no será en una sola administración.
Es frecuente entre los sanitaristas y expertos en salud discutir sobre la cobertura universal de salud (CUS). Coinciden en la necesidad de equidad, que todos los habitantes de nuestro país tengan igual acceso a una cobertura médica cerca de la gente, en un servicio que incorpore calidad, equidad, y accesibilidad. Que la atención primaria de la salud y la descentralización, sean las estrategias del modelo de atención, el acceso a medicamentos y tecnología apropiada son conceptos siempre presentes.
La imprescindible y postergada reforma del sistema de salud
Un ejemplo de política de Estado es la Ley de Cobertura Porteña de Salud (COPS) que votó la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires en el año 2007 y se implementó a partir del año 2008. Se trata de la primera Ley de CUS del país. Surge esta del Programa de Médicos de Cabecera que desde 1996 fue sostenido por todas las administraciones de diferentes extracciones políticas, hasta evolucionar en su diseño y convertirse en Ley promovida por el entonces Legislador porteño Enrique Olivera.
En CABA ya en diciembre de 2015, sobre una población de aproximadamente 500 mil personas sin cobertura formal se logró construir un padrón de más de 400 mil afiliados, todos con su credencial, con un médico de cabecera de referencia, derivación a niveles de mayor complejidad un tránsito ordenado en el sistema sanitario de la Ciudad y acceso gratuito al medicamento ambulatorio esencial y a los tratamientos de enfermedades crónicas.
En total trescientos clínicos, pediatras, tocoginecólogos, odontólogos atienden a los pacientes en sus consultorios o Centro Médicos Barriales y derivados a los Centros de Salud o los hospitales según el grado de complejidad necesario. Si bien el sistema público ofrece la atención a los pacientes con y sin cobertura formal, los estudios epidemiológicos señalan el beneficio significativo en aquellos pacientes que cuentan con una cobertura formal sobre los que concurren en forma espontánea buscando la atención en el hospital público.
CoPS no es ni más ni menos que una cobertura universal y la Ciudad de Buenos Aires se convirtió en una de las primeras jurisdicciones del país donde todos sus residentes tienen acceso a una cobertura: obra social, prepaga, PAMI y quien no tiene acceso a esas coberturas tiene la Pública de la Cobertura Porteña
En CABA se ha encontrado un camino a seguir donde cada administración continuará con sus aportes. CoPS no es ni más ni menos que una cobertura universal y la Ciudad de Buenos Aires se convirtió en una de las primeras jurisdicciones del país donde todos sus residentes tienen acceso a una cobertura: obra social, prepaga, PAMI y quien no tiene acceso a esas coberturas tiene la Pública de la Cobertura Porteña, un claro ejemplo de política de Estado.
El concepto de vasos comunicantes entre los subsectores financiadores de la salud se aplica a este diseño de CABA, los pacientes pueden tener sus coberturas en una Obra Social o Prepaga o PAMI, si no cuenta con ninguna puede optar por inscribirse en Cobertura Porteña de Salud. Pero un beneficiario que consigue una obra social porque logra un trabajo formal, sale entonces de CoPS y se afilia a la Obra Social correspondiente. Es decir que la obtención de la cobertura médica y el acceso al medicamento se desvinculan en estos casos, de la situación laboral y la retención del salario del individuo, esto es una cobertura universal de salud.
Los avances del conocimiento, el desarrollo tecnológico, los nuevos fármacos y procedimiento hacen que en el sistema sanitario se instale el concepto de “reforma permanente”, para el cumplimiento de esos objetivos es necesario que los distintos gobiernos tomen como aliados al recurso humano experto que tiene el sistema sanitario.
Cobertura Universal
Todos coinciden con el concepto de Cobertura Universal de Salud, sin embargo, pocos tienen experiencia en una estrategia de implementación y es este factor principal, junto a los discursos más políticos que técnicos, donde se confunde seguro de salud con modelo de atención que ponen dudas sobre esta política de salud.
La Cobertura Universal de Salud es en primera instancia un modelo de atención, obtenido el consenso sobre este modelo se podrá discutir sus distintas formas de regulaciones que permitan mayor equidad en cada uno de los subsectores. Intentar “borrar“, el diseño en subsectores del Sistema de Salud Argentino, implica una discusión sin salida ni consensos, que podría generar otro sistema estatal, centralizado con mayor grado de burocratización, manejos poco transparentes de los recursos, sin respeto por la organización federal del diseño sanitario de cada provincia que no ha delegado la salud en el gobierno Nacional.
La Cobertura Universal Pública de Salud prepara, ordena y fortalece el sector público para ofrecer atención médica descentralizada cerca de la gente mejorar la accesibilidad, nominaliza a la población, ordena el tránsito por niveles de atención y mejora el financiamiento Las Coberturas Médicas, de los subsectores de la salud, corresponden a la organización que debe dar el financiamiento a este modelo de atención universal, el sector público, las obras sociales, obras sociales provinciales, prepagas y PAMI son todos actores de financiamiento de la Cobertura Universal de salud que permitirán construir los vasos comunicantes, donde los beneficiarios podrán pasar de un subsector a otro de acuerdo a su situación laboral, su lugar donde vive o el grupo etario al cual pertenece.
La Cobertura Universal Pública de Salud prepara, ordena y fortalece el sector público para ofrecer atención médica descentralizada
En muchas de las discusiones sobre salud aparecen los conceptos de ineficiencia en el gasto. Esto también es real, entonces la Agencia de Evaluación de Tecnología, Conceptos de Gestión Clínica, Medicina Basada en la Evidencia, Consensos con flujo de decisiones de Costo/Eficiencia y Costo/Beneficio, fórmula de Dotación Óptima, programas de Calidad, auditorias, informatización de la Historia Clínica Nacional y de todas las transacciones del sistema, son acciones imprescindibles para la administración de salud, que debe incluir a las instituciones públicas y privadas, financiadores y prestadores.
La organización de las Obras Sociales fue sin duda un avance para los trabajadores, sin embargo la fragmentación interna del sistema producida por cada sindicatos sobre el manejo financiero, hicieron perder en muchos casos, efectividad y calidad y también quedó resentida la equidad y accesibilidad de quienes tienen un seguro provisto por las obras sociales.
Una sociedad que logre que sus ciudadanos y residentes tengan garantizado el cuidado de la salud como la educación, con equidad y sin discriminaciones, genera las bases de la justicia social y el desarrollo armónico
Los trabajadores que financian las obras sociales con la retención de su salario, tienen diferencias muy evidentes en su accesibilidad, equidad, calidad de prestación, no solo por los niveles de salarios, también por el número de aportantes, el lugar geográfico donde viven, todos factores que provocan inequidades y dificultades de accesibilidad.
La Superintendencia de Servicios de Salud debe tener los instrumentos necesarios para regular a todos los subsectores, evaluar la viabilidad financiera, cobros y pagos y el cumplimiento de las prestaciones.
Una sociedad que logre que sus ciudadanos y residentes tengan garantizado el cuidado de la salud y la atención de la enfermedad así como la educación, con equidad y sin discriminaciones, genera las bases de la justicia social y el desarrollo armónico.
*Ex Secretario de Salud de Nación. Ex Presidente de la Sociedad Argentina de Cardiología.