Los entornos actuales en donde se desarrollan negocios -y en especial aquellos en donde la tecnología es protagonista- son cada vez más volátiles, inciertos, complejos y ambiguos. Varias décadas atrás las empresas podían sobrevivir en los mercados sin tener que introducir modificaciones sustanciales en el portfolio de sus Productos & Servicios.
Entender el ecosistema del negocio, desde hace varios años, es una necesidad, y toda visión fragmentada es riesgosa y muchas veces inviable. Esta transformación se ve reflejada en los puestos C-level de las organizaciones, en los que los profesionales deben resolver los problemas utilizando otras competencias que van más allá de las específicas de su área de responsabilidad.
En esta línea, surgió la figura del Chief Business Officer (CBO), una nueva categoría que podría entenderse como la evolución de otras preexistentes como ser la de Director de Negocios, cercano al CEO y al Board de Directores en grandes empresas. El CBO participa en una organización sin importar su tamaño, gestionando aspectos del negocio desde una perspectiva integral (comercial, estratégica y financiera), monitoreando sus indicadores clave y estableciendo objetivos de crecimiento sustentable alineados con la visión y misión. Asimismo, quienes ocupan este rol a menudo trabajan junto a COOs y CMOs (operaciones y marketing), con el fin de asesorar y participar de las iniciativas de marketing y ventas.
Ser Chief Business Officer (CBO)requiere de una predisposición de liderazgo
¿En qué rubros son importantes estos perfiles? El rol de CBO resulta de interés en el amplio espacio de los nuevos negocios digitales, pero también en sectores más tradicionales que están sufriendo fuertes transformaciones, como ser el de la Energía o el de las TICs (Tecnologías de la Información y Comunicaciones). Sin embargo, no excluye a otras industrias, ya que en definitiva, cualquier actividad que busque desarrollar una propuesta de valor diferencial necesita pensar en “sistemas de relaciones” y colaboración. Un enfoque integral, resulta ser el adecuado a la hora de tomar mejores decisiones empresariales.
Ser un CBO consiste en poseer un perfil muy particular, que requiere de una predisposición natural de liderazgo para encarar la solución de los problemas con una visión amplia desde el punto de vista de los negocios. Desde ya, es difícil encontrarlo en aquellos que han elegido su desarrollo enfocado en una especialización extrema de algún rubro. Sin embargo, todo profesional con una sólida formación en negocios (con las habilidades antes mencionadas), combinada a una experiencia demostrada en funciones de gestión, podría desempeñar esta función.
Como sucede, en general, con todos los puestos gerenciales se requiere de actualización constante. Las áreas de acción son muy variadas debido a la constante evolución de las tecnologías de la información, la gestión de datos, la introducción de la Inteligencia Artificial, las redes móviles de nueva generación, entre otras, las que van generando nuevas oportunidades. Son justamente estas tecnologías las que se combinan y posibilitan nuevas propuestas de valor para todos los verticales de la industria.
En síntesis, podemos afirmar que la importancia de un puesto como el de CBO radica en su perspectiva amplia de la concepción del negocio, lo cual requiere de herramientas diversas y un historial con formación y experiencia probada en la gestión. No es llamativo que inclusive los fundadores de ciertas Start-Ups busquen perfiles de estas características o eventualmente busquen cubrir gaps en su formación para completar la herencia de su formación de base.
*Docente de la Licenciatura en Gestión de Negocios del ITBA.
