Cristina Iglesias y su hija Ada de 7 años desaparecieron hace dos días y su familia sospecha lo peor. Es que no solo abandonaron la casa en la que estaban cumpliendo la cuarentena, sino que además la Policía encontró manchas de sangre y señales de un gran desorden.
La mujer de 40 años estaba en pareja con un hombre al que también le perdieron el rastro. Iglesias vive en una casa de la calle Domingo Purita al 400, en la localidad bonaerense de Monte Chingolo, en el partido de Lanús.
Fuentes policiales consultadas por PERFIL confiaron que la denuncia por averiguación de paradero fue realizada por la hermana de la mujer en la comisaria Sexta.
Desde el colectivo "Familiares Atravesados por el Femicidio" también plantearon sus dudas respecto al paradero de Cristina y su hija. "Los mensajes recibidos de su celular eras esquivos y además hay manchas de sangre en su casa que fueron limpiadas", dijeron en un mensaje difundido en las redes sociales.
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Un dato que sorprendió a los investigadores, además del revuelo, es que el colchón de la mujer había sido lavado. Y todavía estaba mojado.
Según las fuentes, el último contacto que tuvieron los familiares con ellas fue el miércoles a la noche.
Fernando Iglesias, hermano de Cristina, reveló que el novio de la mujer desaparecida "alquilaba una pieza en otro lugar y la policía encontró allí los documentos y llaves" de la supuesta víctima.
El hombre aseguró que hacía poco tiempo que Cristina estaba en pareja con esa persona, por lo que no sabía si había problemas en la relación o si era violento, ya que no lo conoció.
"Pedimos por favor que las encuentren lo más rápido posible, ella nunca se hubiese ido sin decirnos", expresó el hermano.
