Mientras avanza la investigación por la muerte de al menos 12 bebés en el Hospital Neonatal "Dr. Ramón Carrillo" de Córdoba, la madre de una de las víctimas aseguró que los médicos no supieron explicarle el motivo del fallecimiento de su hijo. "Nos habían asegurado que la situación era normal", sostuvo.
"Mi bebé nació totalmente sano. Y a la hora y media se descompensó", comenzó diciendo Vanesa Cáceres, mamá de uno de los niños fallecidos. "No era un embarazo de riesgo, sí una cesárea programada", detalló en declaraciones a LN+.
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El caso del hijo de Vanesa fue uno de los cinco pequeños que murieron y no presentaban patologías previas. “Me avisan que tuvo una arritmia y entra a hacer paros cardíacos. Empiezan a ponerle drogas para que reaccione su corazón", continuó con su crudo relato.
"Después empeoran las cosas. Todo eso en el mismo día. Al tercer paro cardíaco ya no pudo continuar”, indicó, al mismo tiempo que afirmó sus dudas acerca de las circunstancias en la que ocurrió la muerte de su bebé.
"No supieron darnos explicaciones; nos dijeron que no sabían cómo llegó a estar en ese estado crítico un bebé que nació sano”, agregó Vanesa. Por último, aseguró que irá "hasta las últimas consecuencias" por la vía judicial para saber qué fue lo que ocurrió.
Acorde a las fuentes del caso, las dos hipótesis más fuertes que se manejan van de la mala praxis a una presunta intencionalidad, mientras que no descarta la posibilidad de un "asesino o asesina serial".
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Autoridades del Ministerio de Salud cordobés reconocieron que el número de casos "no es común" e informaron que mientras avance la causa se ordenó apartar de 23 empleados. El centro de salud, en tanto, lleva adelante un sumario interno.
"Dijeron que la situación era normal y le dieron 2 paros cardíacos"
Otra familiar de uno de los pequeños que murieron en el mencionado centro de salud que rompió el silencio fue Romina Cejas, madre de una adolescente de 17 años que dio a luz a una beba en los primeros días del pasado junio. Según su relato, la enviaron dos veces a su casa al decirle que tenía "poca dilatación" y en la segunda vez, por insistencia, la internaron.
Poco después de que se realizara el procedimiento, dijo que los doctores esperaban darle el alta pronto. “Mi hija estaba en la camilla con la bebé; noté que lloraba mucho”, rememoró en diálogo con el medio La Voz.
“La bebé tenía sus manitos frías y ya no quería la teta”, continuó diciendo la abuela de la niña, y después dio aviso de que no podían despertarla. “La revisaron y se la llevaron. Antes de irse, nos aseguraron que la situación era normal”, señaló.
“Cuando llegué mi hija estaba con una crisis de nervios y mi nieta estaba bajo cuidados", añadió. Finalmente, la beba murió luego de sufrir dos paros cardíacos, acorde reveló la autopsia.
FP/fl
