POLITICA
Salarios a la baja y ayuda nacional

Ajuste sin deuda en dólares, la receta de Santa Cruz para salir del incendio

Desde que el gobierno de Macri les pagó cash a los holdouts, el grueso de las provincias recurrieron al endeudamiento externo: tomaron más de US$ 12.000 millones. Un monto que, por estos días, se convirtió en una amenaza de default para muchos gobernadores.

20200202_santiago_cafiero_alicia_kirchner_cedoc_g.jpg
Alicia K. La gobernadora santacruceña junto a Santiago Cafiero. | cedoc

La Santa Cruz de Alicia Kirchner pegó el giro soñado por todo gobernador: pasó de peor alumna a provincia ejemplar. En el lapso de tres años fue escalando en el ranking de los 24 distritos, hasta convertirse en una provincia sin demasiadas urgencias financieras ni conflictos políticos. Para lograrlo, se sirvió de una imposibilidad: no haberse endeudado en dólares, a raíz del rechazo opositor y de una interna ideológica en la cuna del kirchnerismo.

Cuando el gobierno de Mauricio Macri promovía esa fórmula entre los gobernadores, Alicia Kirchner no lo hizo. Le sumó un ajustazo en los salarios estatales (con conflictos gremiales larguísimos, sobre todo en 2017, cuando hubo un 0% de aumento), más el beneficio de la coparticipación macrista (en contraste con la suspensión de las obras en las represas hidroeléctricas) y la ventaja de cobrar las regalías petroleras, mineras y pesqueras en dólares. Cada devaluación multiplicó los ingresos santacruceños. “Eso y la habilidad de Alicia para promover un pacto social y financiar obras provinciales”, se jactan cerca de la gobernadora, que el año pasado consiguió la reelección.

Desde que el gobierno de Macri les pagó cash a los holdouts, el grueso de las provincias recurrieron al endeudamiento externo: tomaron más de US$ 12 mil millones. Un monto que, por estos días, se convirtió en una amenaza de default para muchos gobernadores. Los de la Patagonia (Neuquén, Río Negro, Chubut y Tierra del Fuego) pidieron por US$ 1.915 millones.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Días atrás, Alberto Fernández marcó sutilmente el contraste con otras provincias, como Chubut: “Santa Cruz también fue inducida y prefirió no hacerlo. Y ahí tienen sus cuentas bastante saneadas, cuando nos decían que iba a ser Venezuela. Entonces también existe la responsabilidad de los gobernadores”.

Esa decisión en realidad encerró una serie de discusiones al interior del corazón kirchnerista. Máximo Kirchner desalentaba la posibilidad de endeudarse en dólares, mientras la gobernadora sí la consideraba. En marzo de 2018, justo un mes antes de un salto en el tipo de cambio, estuvieron cerca de hacerlo. “Un poco de suerte”, reconoce un dirigente del sur.

Ahora, Santa Cruz le debe a la Nación $ 10.300 millones: esa cifra representa apenas el 0,7% de las deudas provinciales con la Rosada. La deuda provincial pasó de $ 6.614 millones en 2015 a $ 10.300 millones en 2020: una suba del 54%, muy por debajo del stock de deuda de las provincias patagónicas que ahora deben dólares.

“Ajuste” es una palabra prácticamente vedada en el diccionario kirchnerista. Pero lo cierto es que entre 2016 y 2018 las paritarias provinciales perdieron por goleada con la inflación. En 2016 y 2018 la suba fluctuó entre el 15% y el 20%. En 2017 no hubo aumento. Esa decisión generó una protesta furiosa frente al domicilio en el que estaban Alicia y Cristina Kirchner. Ese año se acumularon 86 días de paro docente. Desde ese fondo, la provincia rebotó hasta este presente mucho más reposado. Al inicio de 2017 tenía un déficit de 17%; poco más de un año después contaba con un superávit de 1,2%.