Alberto F intervino el PJ jujeño por avalar la reforma constitucional de Morales
El titular del Consejo Nacional del partido decidió correr de la conducción a Rubén Rivarola, el diputado provincial que brindó su respaldo a la modificación impulsada por el gobernador que motivó un fuerte rechazo social. En el Congreso, organizaciones sociales y de derechos humanos convocaron a una movilización contra la represión para el 20 de julio. Snopek, el otro jujeño castigado por faltar a la sesión del Senado.
Protestas. Las manifestaciones en el Obelisco por la reforma que motorizó el gobernador radical. Las organizaciones en el Congreso. |
NA
El presidente Alberto Fernández, en su rol de titular del Consejo Nacional del PJ, finalmente decidió ayer intervenir el partido en la provincia de Jujuy para “ponerlo en la misma línea del peronismo en todo el país de una clara oposición al gobierno de Gerardo Morales y las políticas represivas”. Con esta decisión, el Presidente desplazó de la titularidad partidaria a Rubén Rivarola, diputado provincial y precandidato a senador nacional, quien dio el aval de su sector a la reforma constitucional impulsada por Morales que fue aprobada pese al fuerte rechazo de los sectores sociales.
“Preocupa la violencia institucional, nunca la hemos aceptado en nuestra gestión y nos preocupa que en algunos lugares de la patria los gobiernos provinciales hagan ese tipo de cosas”, manifestó Alberto Fernández, en alusión a los hechos de violencia que tuvieron lugar en la provincia norteña contra la modificación constitucional que impone restricciones a la protesta social, entre otros cambios.
Según se anunció, la intervención del PJ jujeño estará en manos del intendente del municipio bonaerense de Merlo, Gustavo Menéndez y del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández.
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Entre los fundamentos, Alberto Fernández señaló: “Que no queden dudas que las autoridades del PJ distrito Jujuy, comulgan con un pensamiento totalmente ajeno a los principios y doctrina que fundan el pensamiento justicialista y contradicen el espíritu y la letra de nuestra Constitución Nacional”.
Para reforzar el descontento que se mantiene en la provincia, referentes sociales, sindicales y de los derechos humanos se reunieron en el Congreso y expresaron su “categórico repudio al modelo represivo” de Morales.
Allí convocaron a una movilización para el próximo 20 de julio en todo el país para repudiar los hechos. La marcha se realizará en el marco de un nuevo aniversario de la denominada “Noche del Apagón”, ocurrido en 1976, cuando se sucedieron una serie de secuestros en la localidad de Libertador General San Martín de Jujuy, la mayoría de ellos realizados con vehículos del ingenio Ledesma.
De la conferencia de prensa realizada en la Cámara de Diputados, organizada por la Central de los Trabajadores de la Argentina (CTA), que lidera Hugo Yasky, participaron el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla; Estela de Carlotto (Abuelas de Plaza de Mayo), Taty Almeida (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), así como diputados oficialistas y del Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad.
El factor Senado. El cuestionamiento del justicialismo nacional a las actitudes de la representación provincial también alcanzaron al senador Guillermo Snopek, quien se ausentó el último miércoles de una sesión clave para el kirchnerismo en la que se iban a aprobar 75 pliegos de jueces, entre ellos el de la continuidad en el cargo de Ana María Figueroa. Hace algunos meses, Snopek y otros cuatro legisladores decidieron escindirse del Frente de Todos para conformar Unidad Federal. Pero la ausencia le salió cara a Snopek, a quien decidieron separarlo de la boleta de Sergio Massa como postulante a presidente. Es decir que Snopek tendrá una boleta corta como precandidato a diputado nacional mientras que Carolina Moisés, hoy en la Cámara baja, buscará un lugar en el Senado.
