El presidente Alberto Fernández quedó muy satisfecho con la cena que compartió con la premier alemana, Angela Merkel, en la visita más relevante de su primera gira por Europa. “Fue una charla formidable. Hablamos de todo”, me dijo anoche por whatsapp
“¿Respalda su postura de crecer y luego pagar la deuda?”, le pregunté. “Sí. Absolutamente. Es más: ya se lo transmitió al FMI, acaban de avisarnos”, me contestó. “Nos está yendo muy bien”, aseguró el Presidente, antes de viajar a Madrid.
Fernández estaba de tan buen humor que me animé a consultarle sobre los dichos de Mirtha Legrand: la diva repensó sus palabras de hace unos meses y afirmó que ahora estaba dispuesta a invitarlo a sus almuerzos tan populares. “No está en mis planes”, me aseguró el Presidente. “Y en los de ella tampoco”, agregó.
Alberto cenó con Angela Merkel en busca de apoyo por la renegociación con el FMI
Con relación a la gira europea, Merkel no es una persona que se quede callada por cortesía diplomática cuando no está de acuerdo con algo, y lo demostró varias veces. Por ejemplo, durante el debate entre los líderes europeos acerca de las dificultades de Grecia para honrar sus compromisos externos.
Según interpretó el Presidente, los alemanes respaldarán a Argentina en sus negociaciones con el directorio del Fondo, en primer lugar, como condición necesaria para reestructurar la deuda con los bonistas que se rigen por la legislación neoyorquina. Y en segundo lugar, para postergar los vencimientos con el propio FMI, que se acumulan en 2021 y 2022.
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La intención del Gobierno es postergar los pagos de capital e intereses entre dos y cuatro años para concentrar los recursos en propiciar el crecimiento del país, que se mantiene estancado desde 2011.
El voto de Alemania es importante porque suele arrastrar la voluntad de otros miembros del Fondo. De todos modos, la última palabra en el caso argentino será de Estados Unidos, no solo por su peso específico en el directorio del Fondo sino también porque ejerce una suerte de rol tutelar sobre los países de la región. El mismo papel que ejercen Alemania y, en menor medida Francia, en Europa. Pero, llevar el respaldo alemán debería ayudar.
CP