El candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, encabezó un acto en la sede del PJ, a metros del Congreso, acompañado por el presidente del Partido, el diputado nacional José Luis Gioja, y el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán.
Fernández aludió a una “estigmatización” del peronismo (aunque no lo dijo, se refería a lo que llama persecución judicial) y pidió a los presentes que no sientan vergüenza. El acto tuvo una fuerte carga simbólica de “unidad” dado que el kirchnerismo siempre esquivó la estructura partidaria. La fecha elegida, el aniversario del natalicio de Juan Domingo Perón, fue otro gesto del compañero de fórmula de Cristina Kirchner.
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“Nos necesitan divididos, peleados entre nosotros”, arrancó Fernández, sentado en el escenario. Escuchaba un público variopinto: desde el líder de La Cámpora, Andrés Larroque, hasta el gobernador de Tucumán, Juan Manzur.
“Lo mejor que tiene el peronismo es su gente, somos nosotros, su dirigencia. No nos avergoncemos de ser peronistas”, les pidió el candidato a la tropa que lo escuchaba en la sede de Matheu.
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Además, Fernández les pidió a los dirigentes que no se achanchen una vez que el Frente de Todos sean Gobierno. “Lo que menos necesito es un peronismo dormido”, explicó.
MC
