A poco de que el debate por Ciccone Calcográfica entre en su etapa de alegatos, el ex vicepresidente Amado Boudou y su amigo y presunto testaferro, José María Núñez Carmona, dos de los involucrados en el caso, rompieron el silencio. Fue en la audiencia de este martes, donde ambos declararon en los tribunales de Comodoro Py. El primero en hacerlo fue Núñez Carmona y, tras un cuarto intermedio, siguió Boudou. Coincidieron en despegarse de las acusaciones en su contra y apuntaron, con distintos matices, a Alejandro Vandenbroele, otro de los procesados del caso. En noviembre pasado Vandenbroele se convirtió en “imputado arrepentido” e involucró con su testimonio al banquero Jorge Brito y al gobernador de Formosa, Gildo Insfrán.
El caso, que llegó a juicio el año pasado, fue instruido por el juez federal Ariel Lijo, y en la próxima audiencia, que se realizará el 29 de mayo, está previsto el comienzo de los alegatos.
Boudou aseguró que fue una “mentira” que Vandenbroele, propietario de la firma “The Old Fund”, que compró Ciccone, haya sido su testaferro y apuntó al banquero Raúl Moneta como quien estaba detrás de la operación de compra de la imprenta.
“Vandenbroele quien fue sindicado como mi testaferro dijo la verdad. Que no me conocía, que me había visto una vez de lejos en un bar en medio de un montón de gente. Meses y meses diciendo que un fiscal tenía una foto, un video, que ya iba a salir y como siempre sostuve, era mentira”, dijo Boudou.
El ex vicepresidente también se refirió a una de las pruebas que señalaba el vínculo entre él y Vandenbroele era que este último había vivido y pagado las expensas de un departamento que pertenecía al ex funcionario kirchnerista, algo que dijo que desconocía. "No sé si Vandenbroele vivió en ese departamento, lo que siempre dije es que a Vandenbroele no lo conozco", insistió.
Boudou sostuvo que en dos reuniones de las que se habría señalado que tuvo con los dueños originales de Ciccone nunca existieron. “No hubo ni un testigo ni un papel”, aseguró sobre las posibles pruebas que lo involucraran en un posible ilícito. “Los no testigos, de la no reunión”, ironizó.
A lo largo de una hora de exposición, Boudou recordó sus planes económicos como ministro de Economía, su rol como vicepresidente, su campaña para jefe de gobierno porteño y negó cualquier vinculación con el pedido de levantamiento de la quiebra de la AFIP. En tanto que resaltó “no tenía chance de darle orden al director de la AFIP”, sobre el supuesto pedido de levantamiento de quiebra de la empresa.
La versión de Núñez Carmona
La primera parte de la audiencia estuvo copada por el testimonio de José María “Nariga” Núñez Carmona, amigo de Boudou desde su adolescencia en Mar del Plata. Con detalles, anécdotas y datos de las relaciones entre varios de los involucrados, “Nariga” sostuvo que “la magnitud que tomó este tema” y “la necesidad de vincular este tema con Boudou, por parte de la prensa es impresionante”.
“Los Ciccone dicen que fue el 1, la acusación, el 2. Todos hablan de un lugar distinto. Para mí el único motivo es para tratar de introducirlo a él, en la reunión”, completó.
En su exposición, Núñez Carmona hizo en varias oportunidades referencia al empresario Lautaro Mauro, amigo del ex gobernador Daniel Scioli y también dedicó un momento a desmentir a Vandenbroele. “Alejandro dijo un montón de barbaridades”, sostuvo. “Le tengo cariño, para mí era un hermano menor” y agregó “yo entiendo que el busco una salida el día que nos detuvieron”.