La presidenta Cristina Fernández de Kirchner viajó esta tarde hacia Santa Cruz para recibir el Año Nuevo junto a su familia. Pese al reposo ordenado por los médicos para sanar la fractura del tobillo izquierdo que sufrió el viernes, la mandataria viajó de sorpresa.
El avión presidencial decoló esta tarde desde el sector militar del Aeroparque metropolitano pero por el momento no hay ningunas información sobre el tiempo que la jefa del Estado permanecerá en el sur.
Ayer, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, había adelantado que la Unidad Médica Presidencial era la encargada de evaluar si la mandataria estaba en condiciones de viajar a territorio santacruceño, aunque la Presidenta partió sin que mediara ninguna comunicación oficial.
Como consecuencia de la fractura de tobillo, Fernández de Kirchner suspendió el viaje -previsto inicialmente para el 22 de enero- al Vaticano para celebrar, junto a su par chilena, Michelle Bachelet, los 30 años del Tratado de Paz y Amistad entre ambos países. Asimismo, dispuso que el vicepresidente Amado Boudou represente al país pasado mañana en la reasunción de Dilma Rousseff como presidenta de Brasil.
