Patricia Bullrich encarará desde hoy un viaje a Miami con dos objetivos: continuar captando el voto de argentinos en el exterior y, a la vez, reunirse con empresarios que puedan colaborar con el fundraising de su campaña.
Junto a su flamante jefe de campaña, el legislador porteño Juan Pablo Arenaza –dato anticipado por PERFIL el domingo pasado– tendrá una serie de reuniones donde expondrá su visión del futuro de la Argentina y pensando en atraer inversiones desde diciembre de 2023.
Mañana comenzará con una reunión con “Argentinos en el Exterior” en la zona de Aventura. El lunes estará con inversores del sector bancario, de servicios y turismo. El martes le tocará hablar en una charla sobre “Argentina y Crimen Organizado” y luego tendrá una entrevista con el reconocido periodista Jaime Bayly. Finalmente, antes de regresar, se reunirá con un grupo de residentes de Key Biscayne.
Este año Bullrich ya había estado en EE.UU. Fue a New York y llegó a compartir avión, de manera casual, con el vicejefe de Gobierno porteño –y precandidato en la Ciudad– Emmanuel Ferrario. Arenaza estaba en el medio de ambos. Charlaron animadamente en ese entonces.
Paralelamente, antes de viajar, el jueves se dio un gusto personal: en el café Tostado de Scalabrini Ortiz y Cabello, en el corazón de Palermo, se reunió a charlar con la escritora Pola Oloixarac, reconocida por sus libros y también por sus sugerentes columnas sobre personajes y episodios. Con irreverencia, Pola ha sido motivo de conversación en la dirigencia política. Junto a ellas estaba la historiadora y diputada nacional, Sabrina Ajmechet, una de las “halcones” que trabaja para la precandidatura de Bullrich y quien tuvo un rol clave en el rechazo a la creación de nueve universidades del erario público en la Cámara Baja.
La escritora y la titular del PRO ya se habían encontrado hace un par de años y charlaron largamente. A la exministra de Seguridad le gustan las notas con tono satírico que suele escribir. También enaltece su “energía femenina”, según se la escuchó decir.
En el encuentro se habló de la condena a Cristina Fernández de Kirchner. En ese sentido, Bullrich se lamentó que durante el gobierno de Cambiemos no se pudo cambiar el Código Penal para que las penas por delitos de corrupción contra la administración pública sean más severas.
En otro tramo charlaron de la figura de Mauricio Macri, sobre todo a nivel internacional, la importancia de la unidad de Juntos por el Cambio y acordaron otro encuentro para hablar de los nuevos libros de Pola, y que esta vez sumen a sus maridos a una comida.
Paralelamente, Bullrich no pierde pisada en la Ciudad. Esta semana el diputado Arenaza compartió una charla con vecinos en Parque Patricios y el ministro de Gobierno porteño, Jorge Macri.
Con todo, también Bullrich mostró un apoyo explícito –no solo por redes sino de manera personal– al ministro de Seguridad porteño, Marcelo DAlessandro, involucrado en una causa por un presunto chat donde se habla de un viaje con jueces y fiscales más dos empresarios del Grupo Clarín.
