Los movimientos en Juntos por el Cambio se están acelerando y cada imagen conjunta de dirigentes empieza a tomar un significado especial. En ese marco, después de la foto de Horacio Rodríguez Larreta con los radicales Gerardo Morales y Martín Lousteau en Mar del Plata, que algunos ya mencionan risueños como “los pequeños Beatles”, Patricia Bullrich también tendrá este jueves su postal con correligionarios. La fiesta nacional del Chamamé, en Corrientes, será la sede para un encuentro con el gobernador local Gustavo Valdés y la pareja Carolina Losada y Luis Naidenoff, entre otros dirigentes del centenario partido.
Cerca del mandatario correntino, que fue quien cursó las invitaciones, le buscan restar relevancia política al encuentro y aseguran que Valdés hará lo mismo que hace con cualquier dirigente de Juntos por el Cambio que arriba a su provincia. Sin embargo, fuentes del radicalismo reconocen que hay un sector del partido, entre los que lo incluyen, que está decidido a tomar distancia de la estrategia de Morales de acercarse al jefe de Gobierno porteño.
“El acercamiento a Horacio ha generado que mucha gente en la UCR descubra que la discusión siempre fue quien negociaba con el PRO. Y en ese acuerdo Martín y Gerardo hacen el trabajo de desgastar a Mauricio”, asegura un dirigente radical. “Por eso los que no están en esa lógica primero fueron a buscar a Facundo (Manes), pero como su candidatura no anda ahora van por Patricia”, agrega.
El interrogante que queda abierto en muchas cabezas, tanto del radicalismo como del PRO, es si el acercamiento con Bullrich es genuino y estando dispuestos a armar un acuerdo interno o son meras señales que Valdés y compañía le están mandando a Morales, pero sobre todo a Larreta, para que no crea que puede negociar con él en nombre de todo el radicalismo.
Alfredo Cornejo había sido el primero de los referentes radicales en mostrarse cerca de la exministra de Seguridad y en coquetear con un armado conjunto. Valdés viene teniendo una relación cada vez más tensa con Morales; el correntino busca tallar cada vez más fuerte en las decisiones partidarias pero el jujeño suele recibir críticas por su centralismo. Losada, en tanto, es una de las figuras prominentes en el radicalismo, con serias chances de competir por la gobernación de Santa Fe o incluso integrar una fórmula presidencial. ¿Una fórmula con dos mujeres? “Yo ya lo escuché en varias mesas de dirigentes, y tendría mucha potencia”, asegura una voz de JxC que especula con una fórmula Bullrich-Losada. Automáticamente se ataja: “Falta muchísimo igual”.
En ese tiempo que falta hasta las definiciones, cada espacio intentará sumar más apoyos. “Tenemos que estar firmes en la narrativa y unidos, con una competencia ordenada y sin golpes bajos”, anticipa un dirigente que viene advirtiendo que el oficialismo “está cada vez más competitivo”. “Se mantienen unidos a pesar de tener diferencias insalvables, unifican el relato y enfrente nosotros nos mostramos divididos. Si la competencia será cómo se roban los aparatos no creo que nos ayude”, dice.
Hoy son cada vez más las voces que ven como inevitable una primaria entre Rodríguez Larreta y Bullrich, con sectores del radicalismo engrosando las filas de ambos espacios. “Patricia genera más credibilidad por las convicciones pero debilidad por la falta de aparato”, razona un dirigente radical. “Lo de Horacio tiene el respaldo de la gestión, pero Patricia está con una lectura más fina de lo que está pasando en la calle. Horacio está más en la superestructura, lo que para mi es un error”, describe otro correligionario que empezó a mirar con más atención el crecimiento de Bullrich.
La titular del PRO, mientras tanto, busca seguir consolidando su precandidatura como representante de los halcones de Juntos por el Cambio. En ese marco, cuatro días después de la fiesta del chamamé viajará a Villa La Angostura para reunirse con Mauricio Macri. Según pudo averiguar PERFIL, serán dos días de trabajo. “Tuvieron un primer encuentro en diciembre, ahora seguirán avanzando en diferentes temas durante dos jornadas”, cuentan en el PRO, dando a entender la sintonía que existe entre ambos. Aunque algunos ven con suspicacias que Macri siga levantando la figura de María Eugenia Vidal, en el macrismo ya saben que a la exministra de Seguridad ya no la podrán bajar. “Está claro que ya no está más la chance de que Patricia se baje por pedido de Mauricio para que el candidato sea Horacio”, asume un macrista que está cerca de Bullrich.