Sin su piloto fucsia ni sus flores de colores vibrantes, Cristina apareció el pasado 7 de julio -en la cena de camaradería que el ámbito castrense brinda anualmente- rodeada de militares y vestida totalmente de negro y con perlas como accesorio.
Su solemne atuendo podría responder al estricto protocolo de las fuerzas armadas, sin embargo, una fuente del Ministerio de Defensa aseguró a Perfil.com que en estos actos no hay rigurosidad en la vestimenta que deben usar las autoridades civiles. “La mujer –y en este caso la Presidenta- se maneja siempre por lo que rige la moda fuera del ámbito militar, no hay ninguna norma escrita así que ella puede ponerse lo que quiera”.
Entonces, ¿por qué optó Cristina por el negro riguroso y solemne? ¿Por qué cuando se encuentra en el ámbito castrense su look parece más el de una dama en duelo que otra cosa?
Perfil.com consultó al diseñador Benito Fernández, quién aseguró que “esa actitud en su vestimenta debe querer significar algo, porque habitualmente ella usa blanco o colores vibrantes que le quedan muy bien. Ahí hay algo en donde evidentemente no se está sintiendo cómoda y entonces elige el negro para neutralizarlo”.
Todas lo sabemos. El tip básico de los manuales de moda es que el negro no falla nunca. “Es un color recurrente cuando te sentís insegura, gorda o fea; el negro ayuda a las mujeres a verse más fuertes”, aseguró Fernández.
Desde antes de asumir como Presidenta, cuando todavía era primera dama, Cristina se encargó de dejar en claro que la imagen es un aspecto fundamental de su estrategia política. Nada de lo que ella use o deje de usar responde al azar. Más bien, todo lo contrario.
En los últimos actos castrenses se la pudo ver a Cristina Kirchner vestida de negro (salvo por las perlas blancas que repitió en dos ocasiones).
El 2 de abril, en el acto central por el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra en Malvinas; el 2 de julio, en el homenaje a los policías caídos en cumplimiento del deber y el 7 de este mes, en la cena de camaradería. Eso sí, de negro solemne pero con una cartera Birkin de Hermès. Una pieza codiciada por las fashion victims que adoran los modelos exclusivos.
Birkin Bag. La "carterita" de la firma francesa Hermès puede costar alrededor de 75 mil dólares, si uno quiere comprarla por internet. Si en cambio uno prefiere conseguirla en la boutique que la firma tiene en la Avenida Alvear, tiene que esperar porque el modelo no está en stock. Y si una compradora sólo quiere averiguar el valor del objeto preciado, debe presentarse personalmente en el local, ya que la cifra –“por elevada”- no se comunica telefónicamente. Habría que ver cómo hizo Cristina para conseguirla.
Para Benito Fernández, la elección de la cartera es “defendible”. Según él, “el concepto de esa cartera es sólido. Ella no puede caer en la frivolidad, pero es la presidenta y tiene que tener presencia y esa cartera tiene un sustento independiente del precio. Es evidente que está pegada a lo fashion de Sex and the City pero no deja de ser algo de modernidad y feminidad. Después de todo ella es mujer también.”
El diseñador fue contundente: “Si se puso negro habrá sido por algo. Si es para estar más firme o para dar otro tipo de imagen, no lo sé, pero la moda siempre transmite algo. No es casual que ella elija aparecer vestida de negro en esas ocasiones, hay mucho de inconsciente en eso. Puede querer significar que está más bloqueada al contexto exterior o que se sienta insegura, pero evidentemente hay un lenguaje nuevo en estos datos.”
(*) Redactora de Perfil.com