El bloque kirchnerista en la Cámara de Diputados consiguió un despacho de mayoría y logrará que esta misma semana, a pedida de la misma Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el recinto de la Cámara Baja debata el proyecto de ley con la que el Gobierno pretende regular el mercado de papel a través del control de las empresas del sector, como Papel Prensa.
El proyecto que declara como "interés público la producción, comercialización y distribución del papel para diarios" fue debatido en el plenario de las comisiones de Comercio, Comunicaciones; Libertad de Expresión; Asuntos Constitucionales y Peticiones, Poderes y Reglamento de la Cámara de Diputados. La Sala 1 del Anexo de Diputados estuvo colmada.
La Presidenta de la Comisión de Comercio, la diputada Juliana Di Tullio, encabezó el encuentro y ni bien comenzó la lectura del dictamen de su comisión repasó la historia del sector, considerando la de Clarín y La Nación, así como la salida del diario Crítica y de la Editorial Perfil.
El diputado Carlos Amadeo (PJ disidente) retrucó a la legisladora K y recordó que "se debe salvaguardar a la prensa independiente" y así cuestionó el "uso indiscriminado de la pauta oficial, como el caso de la Editotial Perfil y las agresiones a Lanata". Su compañera de bloque, Graciela Camaño, acusó al oficialismo de "evadir los debates" y de "clausurar el Congreso" desde 2009 hasta ahora.
El diputado Federico Pinedo (PRO), por su lado, sostuvo que el proyecto del papel "es inconstitucional por donde se lo mire" y que se trata de "un mecanismo para que se confisque una empresa privada sin indemnización". Según estimó, "no es una iniciativa aislada: sigue a la Ley de medios y el abuso de la publicidad oficial".
En tanto, Patricia Bullrich (Unión por Todos) pidió que se invitara "a los diarios a que vayan al debate para que sean escuchados" y consideró que las audiencias públicas ya realizadas "no tienen validez". Y apuntó: "Qué paradoja, Papel Prensa va a ser 'apropiada' por segunda vez, según lo que el oficialismo dice".
Como si aún fuera la campaña, Ricardo Alfonsín (UCR) le lanzó un mensaje a Cristina: "Ella dijo que distribuyó la palabra... A mí no me llegó nada (...) Porque no nos dan a nosotros un espacio en la TV Pública", reclamó.
Asimismo, Felipe Solá aseguró que la primera parte del proyecto "es acompañame que no es grave" (sic), pero que los artículos más perniciosos para Clarín y La Nación "son sexo explícito, sin regodeos".