El ex presidente Eduardo Duhalde agradeció a todos los dirigentes políticos y empresarios que hace diez años, cuando asumió al frente del gobierno nacional, lo "ayudaron a pacificar el país y mantener el sistema democrático" vigente tras el estallido social y económico que había causado la renuncia del entonces presidente, Fernando de la Rúa.
"Era la última oportunidad que teníamos porque la situación era tremendamente difícil. Recuerdo a todos los hombres que me apoyaron cuando convoqué a un gobierno de salvación y obtuve el respaldo en la Asamblea Legislativa", rememoró Duhalde.
El ex mandatario, que asumió la Presidencia el 1 de enero de 2002, destacó el aval recibido, entre otros, por los legisladores de la UCR; el actual presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), José Ignacio de Mendiguren; y el gobernador chaqueño Jorge Capitanich, que fue su jefe de gabinete en la gestión al frente de la Argentina.
Duhalde indicó que la realidad del país era "desesperante" tras la sucesión de presidentes que prosiguió a la renuncia de De la Rúa: Ramón Puerta, Adolfo Rodríguez Saá y Eduardo Camaño.
En su discurso a la Asamblea Legislativa, que preparó en la casa de su hermana durante la noche de fin de año de 2001, Duhalde planteó que si le "daban tiempo" de gestión "en sólo seis meses" lograría sacar al país "de la depresión económica". Al respecto, señaló que cuando llegó a la Presidencia tomó "las medidas que debió haber llevado a la práctica De la Rúa", especialmente "salir de la convertibilidad y llevar al país a un modelo de producción".
"Estoy muy agradecido a los que me acompañaron, a De Mendiguren, a (el ex ministro de Economía, Jorge) Remes Lenicov, y también a Capitanich, que fue lucharon denodadamente para imponer el nuevo modelo", comentó Duhalde.
En tal sentido, resaltó que había en el país una "oposición cerrada que quería volver al orden económico anterior en detrimento de los empresarios argentinos y la producción" nacional. "Por eso estoy muy agradecido a quienes me acompañaron más allá de que pudieran estar en otro sector del peronismo o partido político", dijo.
Hoy los ex funcionarios de Duhalde están muy lejos de él. El ex ministro de Producción y presidente de la Unión Industrial Argentina, José Ignacio de Mendiguren, apoya a Cristina Fernández de Kirchner, al igual que el ex secretario de Deportes y Turismo, Daniel Scioli.
El ex jefe de Gabinete Alfredo Atanasof hoy es parte de Unión Celeste y Blanca, la fuerza que comanda Francisco De Narváez. Jorge Capitanich, otro ex Jefe de Gabinete, va por su segundo mandato como gobernador en Chaco y ratificó su apoya a la Presidenta. Por su parte, el ex secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, hoy es un incondicional del kirchnerismo.
Por otro lado, Duhalde se mostró "consternado" por el fallecimiento del gobernador rionegrino Carlos Soria, ocurrido esta madrugada en una chacra situada en las afueras de la ciudad provincial de General Roca. Recordó que Soria estuvo al frente de la ex Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE) cuando asumió el Gobierno nacional, hace una década. "Para mí y mi esposa (Hilda González) era un hombre muy querido, de carácter y muy trabajador", expresó Duhalde sobre el mandatario rionegrino.