Los primeros 45 días de gestión del presidente Alberto Fernández parecieron tener la aprobación de más de la mitad de los argentinos, y si bien algunas de las primeras medidas del Gobierno fueron mejor recibidas que otras, según una encuesta de opinión pública la mayoría estima que, durante su presidencia, la situación económica mejorará. Mientras tanto, en la vereda de enfrente, más de la mitad de los consultados creen que el expresidente Mauricio Macri se mantiene como el principal líder opositor.
Los datos surgen del “Tracking de Opinión Pública”, la encuesta online de la consultora Opinaia, que relevó 1.800 casos nacionales a público en general entre el 20 y el 24 de enero de 2020, mediante un cuestionario con preguntas abiertas y cerradas.
Entre los consultados, el 59% tiene una imagen positiva a la hora de evaluar los primeros días de gestión nacional. En comparación, la consultora contrasta los números con relevamientos previos que hicieron durante el último año del mandato de Mauricio Macri. En noviembre, por ejemplo, su gobierno tenía una aprobación del 35%, mientras que la imagen negativa en ese mismo mes era del 65%. Con la administración actual la percepción negativa llega al 41%.
Cabe destacar que los votantes del Frente de Todos son quienes califican, casi en su totalidad (un 97%), como positiva la gestión de Alberto. No obstante, también hay un gran porcentaje de aprobación entre quienes votaron al Frente de Izquierda y a Roberto Lavagna: un 46% de votantes de Nicolás del Caño ven con buenos ojos la gestión del mandatario, mientras asciende a un 61% la valoración positiva de quienes votaron por el exministro de Economía.
Guido Moscoso, politólogo y Gerente de Opinión Pública de Opinaia, sostiene ante la consulta de PERFIL que los altos niveles de aprobación del líder del Frente de Todos tienen que ver con dos fenómenos: la “luna de miel” propia del comienzo de cada mandato presidencial, y cierta mirada positiva sobre las primeras políticas de la gestión. “En primer lugar, este período de gracia inicial es producto tanto de la legitimidad del cargo, el hecho de ser presidente, como de haber ganado una elección de punta a punta, y siendo oposición”, dice.
El primer mes de Alberto en 20 gestos
En segundo lugar, explica que en un contexto de crisis económica, de recesión, inflación y pérdida de empleo “las medidas de contención social son muy bien recibidas y evaluadas. Es por estos factores que Alberto Fernández logra la adhesión de sus votantes, y también es aceptado por buena parte de los votantes de Lavagna y Del Caño”, analiza.
Ante la consulta de quién encabeza la oposición, un 56% de los encuestados apuestan al liderazgo del máximo referente de Juntos por el Cambio. Pese a que después de entregar los atributos de mando el 10 de diciembre se mantuvo al margen de la discusión política, y en los últimos días anunció que vuelve al ámbito de la gestión deportiva, para la opinión pública Mauricio Macri “mantiene el liderazgo político de su espacio”, considera Guido Moscoso. “Así como Boca fue un antecedente y condición necesaria en la carrera política de Macri, el nuevo cargo en la FIFA podría reforzar su proyección y liderazgo internacional”, opina en diálogo con este medio.
Sobre el futuro político de Macri, si bien el liderazgo del PRO lo ocupará desde febrero Patricia Bullrich, el politólogo considera que el cargo del expresidente en la FIFA podría o bien “articularse con la conducción de Cambiemos en el plano de la política doméstica" o ser "una salida elegante en la transición hacia un nuevo liderazgo opositor”.
Por otro lado, en relación a las primeras medidas que tomó el Gobierno, el congelamiento de tarifas fue percibido como positivo por el 82% de los consultados, la doble indemnización para despidos sin causa es “aprobada” por el 73% y la entrega de tarjetas alimentarias tiene el visto bueno del 62% de los encuestados. “Son las medidas mejor evaluadas en un contexto de crisis”, analizaron desde Opinaia en el estudio.
En tanto, el impuesto del 30% para la compra la compra de dólares y bienes en el exterior, y la suspensión de la fórmula de movilidad jubilatoria por 180 días emergen como las políticas más criticadas, con apenas un 18% y un 8% de imagen positiva respectivamente, y una valoración negativa del 33% la primera y del 46% la segunda. En el caso puntual del impuesto PAIS, según el estudio, es percibido “más como una devaluación encubierta del peso y no tanto como una forma de promover la inclusión social”.
La situación económica sigue firme en los últimos meses entre las prioridades que, según los encuestados, debería tener el gobierno. El 57% señala como prioritario “ordenar la economía”, y el 24% considera que lo más importante es “terminar con la pobreza en el país”. La denominada “grieta” que marca divisiones diariamente en temas sociales, políticos y económicos, se ubica en tercer lugar con el 10%, seguida por la Justicia: un 9% estima que es prioritario mejorar su funcionamiento.
Para el politólogo, la disminución en la valoración negativa del gobierno con el cambio de administración se explica porque “se oxigenaron las expectativas económicas de los argentinos” sobre todo entre los votantes del Frente de Todos. “Alberto Fernández tiene un fuerte mandato económico”, dice en relación a las prioridades que señalan los encuestados.
A futuro, la expectativa de los 1800 consultados es en su mayoría positiva: un 47% cree que su economía mejorará con el mandato de Alberto Fernández, aunque un 24% cree que seguirá igual, y un 29% cree que empeorará. Los cambios sustantivos, apunta Guido Moscoso, “aún no se perciben en el día a día”: “Solo el 4% afirma que la situación económica actual es positiva, al tiempo que cerca del 80% manifiesta que su economía personal está igual o empeoró desde la asunción del nuevo presidente”, finaliza.
A.G./