La niebla de Ezeiza demoró la llegada del nuevo asesor de José Luis Espert. Pero finalmente su avión aterrizó, proveniente de Nueva York. Se trata del estadounidense Dick Morris, uno de los consultores políticos más conocidos en los Estados Unidos. Durante casi 20 años fue una figura muy influyente sobre Bill Clinton, al punto de convertirse en una de las voces más escuchadas por el ex presidente demócrata. En la Argentina también cuenta con antecedentes de peso: fue uno de los autores intelectuales del ascenso de Fernando de la Rúa a la Casa Rosada. Y algo más: asesoró a Mauricio Macri, cuando el ex presidente de Boca daba sus primeros pasos en la política. Ocurrió poco antes de la llegada y consagración de Jaime Duran Barba en el macrismo, a fines de 2004.
A los 72 años, ayer Morris volvió a la Argentina. Llegó a la previa de una elección presidencial. En el Aeropuerto de Ezeiza lo esperaba el candidato a vice de Espert: el periodista Luis Rosales. Además de especializarse en política internacional y de haber sido diputado provincial por Mendoza, Rosales trabajó en varias campañas junto a Morris. De ahí, el contacto tan directo con el consultor estadounidense. Cerca de Espert aseguran que Morris les hará precio de amigo, a raíz de esa vieja relación. “Trabajará al costo por la amistad con Luis”, aseguran.
Morris ya se puso a trabajar para la fórmula ultra-liberal. Ayer tuvo una reunión con Espert, Rosales y el resto del equipo del frente Despertar. Hoy seguirán concentrados en delinear una estrategia general. Una vez que acuerden ese rumbo conceptual, el trazo grueso se volcará en los spots, los mensajes para las redes y hasta en el discurso de Espert.
El economista y su vice no pronostican grandes cambios en su hoja de ruta. Al contrario, suponen que Morris los empujará a profundizar el actual camino: confrontación tanto con el kirchnerismo como con el macrismo. Para Espert, el gobierno de Macri es una versión del “kirchnerismo con buenos modales”.
El candidato a su vez acusa el Gobierno de copiarle la agenda de propuestas, para evitar la fuga de votos por derecha. “Están desesperados”, asegura. Espert se refiere al anuncio del llamado Servicio Cívico Voluntario en Valores, dependiente de la Gendarmería, al impulso a los tratados de libre comercio y al Acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea. Desde ayer, Dick Morris se está familiarizando con ese panorama.
El periodista y escritor Ernesto Semán recuerda que “Morris tenía una habilidad especial para leer encuestas, una velocidad mental que superaba la media y una capacidad de trabajo que parecía infinita”. Semán cubrió la campaña aliancista de 1999 y publicó el libro Educando a Fernando. Cómo se construyó De la Rúa presidente.
En los noventa, sus adversarios lo señalaban como el monje negro de Clinton, por haber desplazando a buena parte del staff de la Casa Blanca y del Partido Demócrata.
Más recientemente, le prestó servicios al senador republicano Ted Cruz, quien tiene una línea más conservadora que la de Donald Trump.
Como consultor de Espert, Morris deberá lidiar con una primera dificultad: la Justicia Electoral dio de baja a todos los candidatos bonaerenses de Despertar. El economista ya anunció que apelará la decisión, y denunció al Gobierno por el intento de “proscripción”.
