La pandemia de coronavirus obligó a varios países a asistir al sector privado para que pueda sobrevivir ante la crisis económica y las restricciones que se imponen por las diversas cuarentenas. Esa tendencia llevó a diversos intelectuales y economistas en todo el mundo a debatir el rol del Estado ante las empresas, y Argentina no es ajena a esa discusión. En este marco, la diputada oficialista Fernanda Vallejos sugirió este fin de semana que si la administración pública brinda subsidios a los grandes grupos empresarios, pueda hacerlo "a cambio de una participación en el capital de las compañías".
La propuesta de la legisladora del Frente de Todos, formalizada en un hilo de Twitter, incluye la iniciativa de "negarle ayuda a aquellas empresas que operan offshore, fugan divisas y evitan tributar lo que les corresponde al fisco argentino". Vallejos prometió además que presentará "un proyecto de ley" en ese sentido "que complemente los criterios ya establecidos".
"Si el Estado decide subsidiar a grandes grupos, sería razonable, como lo han hecho antes y lo están haciendo ahora las economías más desarrolladas, que lo haga no como un regalo a esas empresas, sino a cambio de una participación en el capital de las compañías", opinó la diputada este domingo 17 de mayo. La expresión surge luego de que el Gobierno nacional anunciara en los últimos días que extenderá los beneficios del Programa de Asistencia al Trabajo y a la Producción (ATP), por lo que el Estado argentino volverá a pagar hasta la mitad de los salarios del sector privado de mayo, y reducirá el pago de contribuciones patronales, entre otras asistencias.
11. Por otra parte, si el Estado decide subsidiar a grandes grupos, sería razonable, como lo han hecho antes y lo están haciendo ahora las economías más desarrolladas, que lo haga no como un regalo a esas empresas, sino a cambio de una participación en el capital de las compañías
— Fernanda Vallejos (@fvallejoss) May 17, 2020
La propuesta fue duramente criticada por el diputado de Cambemos Luis Petri, quien salió al cruce este domingo y expresó en sus redes sociales que "no es posible que el Gobierno, aprovechando el estado de necesidad de las empresas, intente quedarse con su paquete accionario a cambio de ayuda". Además, reveló que, con un grupo de funcionarios, va a "presentar la prohibición de condicionar la ayuda estatal a la participación accionaria del Gobierno".
"Con esta medida de tomar por asalto empresas, el Gobierno comienza a señalizar la autopista que nos conduce a Venezuela. Vamos a defender la República y la Constitucion! No pasarán!", afirmó el mendocino en su cuenta de Twitter, y dijo que "es una locura populista, solo así puede describirse la propuesta de aprovechar la pandemia y la crisis económica para apropiarse de las empresas que propone el kirchnerismo". Por último, concluyó: "El Gobierno, que por razones sanitarias obliga a las empresas a cerrar sus puertas, ahora busca apropiárselas cuando les ofrece ayuda para mantenerlas a flote. Es psicótico".
No es posible que el Gobierno aprovechando el estado de necesidad de las empresas intente quedarse con su paquete accionario a cambio de ayuda. Con un grupo de legisladores voy a presentar la prohibición de condicionar la ayuda estatal a la participación accionaria del Gobierno
— Luis Petri (@luispetri) May 18, 2020
No fue el único que criticó la sugerencia. Su correligionario José Cano señaló que "el deseo de la diputada kirchnerista Fernanda Vallejos: querer adueñarse de las empresas que el Estado ayuda en este momento de pandemia. Y eso que ya intentaron con Ciccone y les fue mal".
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La propuesta. "Es claro que estamos ante una situación extraordinaria que, por la enorme cantidad de dificultades sanitarias, económicas y sociales que implica la pandemia, demanda una fuerte capacidad de respuesta del Estado", comenzó a explicar Vallejos este fin de semana en un hilo de Twitter. "Ello implica la inyección de una importante cantidad de recursos que deben ser suficientes para garantizar la preservación del tejido productivo y el bienestar de las familias mientras dura el confinamiento", agregó.
En este marco, según la funcionaria, el Estado tiene dos grandes opciones. "Una es aplicar una política de transferencia de ingresos y distintos mecanismos de ayuda de carácter universal, el otro es asignar esos recursos sólo a quienes el Estado evalúa que los necesitan", explicó, y remarcó que el gobierno argentino "ha optado por este segundo camino", de ayudas focalizadas. En ese sentido, aseguró que "los criterios aplicados para determinar quiénes acceden y quienes son excluidos de las ayudas, se tornan cruciales".
1. Es claro que estamos ante una situación extraordinaria que, por la enorme cantidad de dificultades sanitarias, económicas y sociales que implica la pandemia, demanda una fuerte capacidad de respuesta del Estado.
— Fernanda Vallejos (@fvallejoss) May 17, 2020
"La noticia de que varios grupos económicos de los que se tiene conocimiento que han protagonizado distintos episodios de fuga de capitales, que tienen sede o vinculaciones con guaridas fiscales, etc, accedieron al ATP, plantea la necesidad de revisar esos criterios", aseveró la diputada y dijo que si los recursos no alcanzan para todos, "resulta injusto que empresas con probada capacidad y recursos propios para afrontar los salarios de los trabajadores, capturen recursos públicos que deberían servir para cualquier otro fin de primer orden".
Vallejos sostuvo que esas prioridades podrían ser "homologaciones de convenios salariales que eviten el recorte del 25%, aumentar jubilaciones, ampliar la cobertura y/o el monto del IFE, asistir más fuertemente a empresas en verdaderas dificultades, entre otras". Además, propuso: "Un criterio básico de exclusión sería negarle la ayuda a aquellas empresas que operan offshore, fugan divisas y evitan tributar lo que les corresponde al fisco argentino. En este sentido, vamos a presentar un proyecto de ley que complemente los criterios ya establecidos".
Por otra parte, resaltó que "si el Estado decide subsidiar a grandes grupos, sería razonable, como lo han hecho antes y lo están haciendo ahora las economías más desarrolladas, que lo haga no como un regalo a esas empresas, sino a cambio de una participación en el capital de las compañías".
AB/FF