Los siete detenidos durante los incidentes de ayer en el Congreso Nacional, cuando se realizaba la elección del rector de la UBA, fueron excarcelados esta tarde después de declarar ante el juez Guillermo Montenegro.
Montenegro concedió las siete excarcelaciones luego de fijar caución juratoria al consejero superior de la FUBA, Agustin Vanella, Leonardo Morgenfeld –docente e investigador del Conicet-, Rodolfo Caivano, Alejo Caivano, Sofia Elgani, Diego Di Carlo –presunto fotógrafo ajeno a los hechos- y Horacio Segovia; este último continuará detenido por requerimiento del juzgado de garantías 2 de San Justo, donde está imputado en una causa por robo.
El juez federal Guillermo Montenegro y el fiscal Carlos Stornelli les tomaron declaración como imputados de los presuntos delitos de "atentado y resistencia a la autoridad", "lesiones" y "daños" en los enfrentamientos con agentes de la Policía Federal. Luego de la audiencia judicial, fueron trasladados nuevamente al Departamento Central de Polícía donde serán liberados a última hora de la jornada.
Algunos de los detenidos pertenecen a las agrupaciones políticas universitarias del Movimiento Socialista de Trabajadores (MST) y del Partido Comunista Revolucionario (PCR), dos de las agrupaciones que conforman la dirección de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA).
Mientras se desarrolló la declaración indagatoria, un centenar de activistas de la FUBA se manifestaban en exigencia de la libertad, y un grupo de ex diputados formado por Patricia Walsh, Mario Cafiero, Vilma Ripoll, así como por el legislador porteño Rubén Devoto, llegaron al juzgado para interesarse por la situación de los detenidos y reunirse con el secretario Matías Molinero.
Al salir Cafiero confirmó que en el juzgado les adelantaron que los detenidos saldrían en libertad durante el transcurso de la tarde.
Las detenciones se produjeron ayer en medio de enfrentamientos con la policía, que dejaron estudiantes heridos, en los alrededores del Congreso Nacional, donde la Universidad de Buenos Aires eligió a su rector luego de ocho meses y seis asambleas frustradas.
Los hechos se desencadenaron cuando los estudiantes de la FUBA, que habían formado "cordones humanos" frente a los vallados policiales para impedir que ingresen los asambleístas, notaron que éstos podían ingresar por las tres bocas del ramal A del subte, ubicadas sobre la avenida Rivadavia.
Militantes de la FUBA voltearon las vallas colocadas sobre la avenida Entre Ríos y allí comenzaron los enfrentamientos con la policía, que reprimió con agua de sus carros hidrantes y de bomberos.
Minutos antes de conocerse la designación del decano de la facultad de Ciencias Veterinarias, Rubén Hallú, en inmediaciones del Congreso comenzaron las primeras detenciones y los gases lacrimógenos.
