El interbloque de Juntos por el Cambio se encamina esta semana a su última aparición en público bajo la denominación y composición con la que viene trabajando hace ya dos años. El próximo miércoles habrá una convocatoria a una sesión especial para tratar algunos temas de relevancia para el oficialismo, como el financiamiento educativo, que consideran que deben resolverse antes del balotaje.
Si bien la semana pasada una treintena de los referentes más duros del PRO evaluaron a nivel interno la posibilidad de salir a manifestarse a favor de Javier Milei, la movida no se concretó para no generar roces antes de tiempo.
Uno por uno, los diputados de Juntos por el Cambio que apoyan a Javier Milei
Sin embargo, el jueves ese mismo sector del PRO firmó otro pedido de sesión especial junto a los tres legisladores de La Libertad Avanza para pedir el tratamiento en el recinto de proyectos que exigen la liberación de argentinos que se encuentran secuestrados por el grupo terrorista Hamas. Los proyectos en cuestión son del propio Milei, quien presentó su primer proyecto de su autoría desde que asumió, de las referentes del PRO Karina Bachey y Sabrina Ajmechet y de la radical Karina Banfi, que renovó su mandato como parte de la nómina de Patricia Bullrich en la provincia de Buenos Aires y que hasta ahora tiene intenciones de presidir el bloque ante la salida de Mario Negri. El pedido de sesión lleva las firmas de Cristian Ritondo y otros diputados como Fernando Iglesias, Hernán Lombardi y Dina Rezinovsky, integrantes del sector de los “halcones” que van sumando señales del alejamiento. El reglamento indica que por tener las diez firmas necesarias, las autoridades de la Cámara deben dar curso al pedido de sesión, pero no habrá quórum por un sencillo motivo: ni siquiera tiene el respaldo de los colegas propios del radicalismo ni de la Coalición Cívica. La expectativa ahora tiene que ver con saber si Juntos por el Cambio seguirá funcionando como tal, aunque con menos integrantes o si se volverá, aunque sea al principio, a una integración por bloques sin una cabeza coordinadora.
Unos 30 legisladores del PRO evaluaron salir a apoyar a Milei
“Nosotros no nos fuimos de JxC y vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para preservar este espacio”, fue la aclaración que realizaron desde la CC tras conocerse el ánimo de acuerdo con LLA del sector del PRO que comulga con Mauricio Macri.
El espacio de Elisa Carrió quedó con solo seis diputados nacionales, lo que lo deja en un lugar con escasa influencia para definir el rumbo. El radicalismo también perdió peso y tendrá un bloque con menos integrantes, lo que lo alienta a su vez a recomponer puentes con el espacio de Evolución, ya sin Emiliano Yacobitti y Mario Negri en la Cámara, dos de los principales artífices de la separación. Otra de las que ya tomó distancia, pero en la dirección contraria, fue Margarita Stolbizer, quien ya fue aliada de Sergio Massa. “Si propone un programa de desarrollo productivo, acompañaremos desde el Congreso”, deslizó la referente del GEN, quien comparte espacio con otros dos legisladores que culminan su mandato como Domingo Amaya y Sebastián García de Luca. Emilio Monzó, que tiene dos años más de mandato y fue mencionado por Massa para volver a presidir Diputados.
