Los aliados del PRO en Juntos por el Cambio, tanto la UCR de manera orgánica como la Coalición Cívica y el Peronismo Republicano, decidieron mostrarse neutrales ante el balotaje de manera casi unánime, salvo casos particulares.
En ese marco, se espera que la exdiputada chaqueña, Elisa Carrió, no vaya a las urnas, según adelantó, y que, incluso, se encuentre de vacaciones en Punta del Este cuando se realicen los comicios. Sus diputados, encabezados por Maximiliano Ferraro y Paula Oliveto, también habían planteado su neutralidad frente al dilema Massa-Milei. Serán opositores pase lo que pase.
Por su parte, los radicales han oscilado. Mientras Gerardo Morales y Martín Lousteau no explicitaron su voto, quedaron más cerca de Massa aunque, en el caso del senador nacional, pretende recorrer el país y mostrarse como una alternativa nacional gane quien gane.
Eso es lo que viene hablando Lousteau con Emiliano Yacobitti, quienes trabajan en ungir al gobernador santafesino Maximiliano Pullaro como otra figura nacional de Evolución Radical. Por su parte, los gobernadores como Gustavo Valdés de Corrientes, Leandro Zdero de Chaco o Alfredo Cornejo de Mendoza quedaron más cerca de los libertarios sin explicitarlo.
Por su lado, Miguel Pichetto, del PJ Republicano, mostró neutralidad pero, por lo bajo, dejó sus brazos abiertos a Massa.
Claro, no se cuenta a Mauricio Macri, quien se disgustó de mala manera cuando cerró un acuerdo con Horacio Rodríguez Larreta para ser diputado y recién lo perdonó hace unas semanas cuando le imploró a Jorge Triaca que le armara un almuerzo con el expresidente.
