En medio de la complicada situación económica y social producto del ajuste que está llevando a cabo el Gobierno, y en la creciente tensión en la relación entre los movimientos sociales y el Ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Pettovello, las organizaciones marcharon ayer en más de 500 puntos en todo el país, con epicentro en la Ciudad de Buenos Aires.
Pero no se trató de una manifestación más. Fue la primera medida contra el gobierno de Javier Milei en que se unieron UTEP y Unidad Piquetera que, junto a otras agrupaciones como Libres del Sur, la Corriente Clasista y Combativa y el MST, entre otros, se movilizaron bajo la consigna “La emergencia alimentaria no puede esperar más. Basta de ajuste!”.
Eduardo Belliboni, dirigente del Polo Obrero, se refirió a la unión entre las organizaciones sociales para manifestarse contra del Gobierno y en diálogo con Noticias Argentinas expresó: “De una punta a la otra del movimiento piquetero y de desocupados de todas las organizaciones sociales nos unimos en una acción sin precedentes. Salimos a luchar para que les devuelvan la comida a los pibes de los comedores populares”.
La jornada de protesta, que fue convocada con el objetivo de reclamar “asistencia para comedores comunitarios” y en rechazo al “congelamiento de los salarios” y de los montos en los planes Potenciar Trabajo, comenzó a concentrarse alrededor de las 9 de la mañana. Sin embargo, el punto principal de la convocatoria tuvo lugar en Juncal y Carlos Pellegrini, pleno barrio de Recoleta, en el edificio donde Sandra Pettovello tiene sus oficinas.
Pasadas las 10.30 se generó el máximo punto de tensión en frente del Ministerio de Capital Humano entre los manifestantes y los efectivos policiales a cargo del operativo.
“Estamos en la mitad de la avenida, pueden pasar los autos. Estamos defendiendo el derecho a la manifestación. No vamos a abandonar ese derecho. Vamos a hacer una manifestación pacífica. Ninguno de nosotros tiene la cara tapada, acá no hay agresiones de parte de los manifestantes”.
Y agregó: “La jornada es una movilización alrededor de la señora Pettovello, para que nos explique por qué le cortó la comida a 45 mil comedores populares”.
El Ministerio de Capital Humano realizó una auditoría y determinó que los movimientos sociales no rindieron cuenta del destino del 80% de los alimentos que les fueron entregados durante el gobierno anterior. A su vez, la cartera que conduce Pettovello informó que se perdió la “trazabilidad” de esos productos, por lo que se desconoce a cuántas personas llegó.
En esa línea, el vocero Manuel Adorni dijo ayer en su habitual conferencia de prensa que “no se ha dejado de asistir a ningún comedor que haya cumplido con los requisitos”, según las auditorías que llevó a cabo el Ministerio.
Mediante un comunicado, las agrupaciones sostuvieron que “con un índice de pobreza de casi el 60 por ciento, una inflación del 20,6 por ciento en enero y una interanual del 254,2 por ciento, el Gobierno decide eliminar la última barrera de contención que tienen las familias más empobrecidas, la asistencia alimentaria”.
