En una extraña pirueta el gobierno resolvió por decreto modificar la reglamentación de la ley 27.260 de sinceramiento fiscal para habilitar el ingreso de familiares de funcionarios al blanqueo.
En sentido contrario de lo que expresaba la Ley del Congreso, la modificación ya despertó críticas dentro y fuera del oficialismo. Sin embargo, Macri contiene el aire y aguarda una arremetida de Carrió, quien se había opuesto fervientemente a habilitar a que familiares de funcionarios blanqueen dinero o propiedades.
En pleno debate legislativo por el blanqueo de capitales, Carrió había enviado un duro comunicado reclamando que los funcionarios y sus familiares directos debían quedar excluidas del beneficio para evitar "acuerdos de impunidad".
La modificación fue realizado a través del Decreto 1206/2016 publicado en el Boletín Oficial con la firma de Mauricio Macri; el jefe de Gabinete, Marcos Peña y el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay.
El cambio. El artículo 21 del decreto reglamentario imponía el carácter restrictivo y la exclusión de los de quienes hayan ocupado cargos de funcionarios públicos entre el 1 de enero de 2010 y la fecha de entrada en vigencia de la ley.
El Gobierno, sin embargo, agregó como último párrafo de ese artículo que los cónyuges, los padres y los hijos menores emancipados de los funcionarios ‘podrán efectuar la declaración voluntaria y excepcional‘ de sus bienes.
Eso ser "exclusivamente respecto de los bienes que acrediten se encontraban incorporados en su patrimonio con anterioridad a la fecha" en que los funcionarios públicos "hubieran asumido los respectivos cargos".
