El pasado sábado 20 de junio, en el marco del feriado por el Día de la Bandera, se registró una manifestación en Plaza de Mayo en rechazo a la intervención de la empresa Vicentin que anunció el gobierno de Alberto Fernández. En ese marco, los históricos pañuelos blancos de la plaza que representan la lucha de las Madres de Plaza de Mayo fueron vandalizados, algunos incluso con simbología nazi.
Es por eso que desde las redes oficiales de Madres de Plaza de Mayo mostraron las imágenes de cómo quedaron los pañuelos tras el reclamo y apuntaron contra "los sirvientes de Macri". Se trata de un lugar en donde tradicionalmente cada jueves desde hace 40 años las Madres se juntan y marchan.
"El Sábado 20 de junio en el auto denominado 'banderazo' atacaron los Pañuelos en la Plaza de Mayo. La fuerza, la representación mundial y el amor a lxs hijxs que dieron su vida por la Patria, no se detiene", comenzaron en su mensaje.
Banderazo por Vicentin: un manifestante fue baleado frente a la Quinta de Olivos
Y agregaron: "Los Pañuelos fueron atacados por los sirvientes de Macri, intentando borrarlos, como si fuera tan fácil. Al Pañuelo, nuestro pueblo, no lo borra así nomas. Jamás podrán borrarlo, porque pasó a ser símbolo de todas las luchas. Al Pañuelo nuestro pueblo no lo borra así nomas. Jamás se borrara porque paso a ser símbolo de todas las luchas".
En las imágenes se puede ver que se tacharon los pañuelos blancos de la plaza y el monumento hecho con venecitas con cruces negras, tachaduras además de la esvástica nazi.
"Son los mismos de siempre, no es la primera vez que pintan la esvástica sobre los pañuelos. Se identifican siempre así, con los nazis, ellos solos lo hacen, no es algo que digamos nosotras. Los pañuelos fueron atacados por los sirvientes de Macri", dijo la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, en diálogo con Página 12.
Por último, Bonafini consideró que el pañuelo atacado porque es "el símbolo de la lucha y la rebeldía, de no callarse ni conformarse. El pañuelo sirvió para enfrentar al enemigo, nos da fuerza. Son nuestros hijos e hijas, los que viven en cada uno que lucha y que pelea, en cada compañera que cocina en los barrios sin ayuda, en cada uno que se la juega".
J.D. / M.C.
