El juez federal de Orán, Raúl Reynoso, sospechado de cobrar coimas para liberar a imputados por narcotráfico, no se presentó hoy a declarar en la causa, a la vez que recusó al magistrado que lo investiga, Julio Bavio.
Reynoso había sido citado para hoy e iba a ser el último de los imputados en prestar declaración, porque ya lo hicieron los abogados René Gómez y María Esper, beneficiados con prisión domiciliaria.
El juez justificó su ausencia por la aparente intencionalidad de atacarlo que tendría el juez Bavio, por lo que presentó una recusación con la intención de que abandone la causa.
Está acusado porque en once causas habría coordinado el cobro de coimas para ceder la libertad a detenidos por narcotráfico. Entre los expedientes que incluye la investigación está el caso del empresario boliviano José Luis Sejas Rosales, quien fuera capturado cuando ingresaba una tonelada de cocaína al país quien, se estimaba, habría pagado unos 350.000 dólares por su liberación.
Durante las jornadas de ayer y el lunes prestaron declaración otros dos implicados en el caso, los abogados René Gómez y María Esper. Ninguno de los dos declaró ante los medios de comunicación, aunque el abogado de esta última, Daniel Luna, relató: "Las declaraciones han sido muy exhaustivas pero satisfactorias, todo lo que ha dicho la doctora Esper ha brindado muchos detalles sobre su falta de responsabilidad en todo esto".
"Ni el doctor Bavio ni el fiscal Villalba hicieron preguntas. A mi entender, no lo consideraron necesario porque encontraron que la doctora no tiene nada que ver con la causa", estimó el letrado.
La investigación que antecedió a los allanamientos del juzgado, entre otros, la llevó a cabo el fiscal federal Eduardo Villalba y el procurador de narco-criminalidad, Diego Iglesias.
Además de Reynoso, Esper y Gómez, se encuentran imputados Lucinda Segovia, Arsenio Gaona y Ramón Antonio Valor, empleados del Juzgado Federal de Orán.
