El Gobierno nacional oficializó este jueves las renuncias de Juan Ignacio Forlón y Julián Álvarez a sus cargos de presidente del Banco Nación y secretario de Justicia y representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, respectivamente, y quedaron habilitados para asumir como nuevos integrantes de la Auditoría General de la Nación.
Forlón y Álvarez, integrantes de la agrupación juvenil kirchnerista La Cámpora, fueron designados ayer por el oficialismo en una polémica sesión en la Cámara de Diputados, en la que la oposición planteó su tajante rechazo a los nombramientos, a los que calificaron de "ilegales", "nulas" y "antirreglamentarias".
Ante esto, el diputado nacional del PRO Federico Pinedo cuestionó en diálogo con Nacional Rock la designación de los camporistas al afirmar que desde el kirchnerismo "están cubriéndose la espalda ante cualquier investigación" y advirtió que se presentarán ante la Justicia para impugnar las designaciones. "Este organismo tiene que tener una composición que sea acorde a la composición del Congreso. El kirchnerismo pretende tener 5 de 7 auditores y es obvio que no tiene cinco séptimas partes del Congreso", detalló.
Pinedo sostuvo que "el kirchnerismo pretende actuar hoy como oficialismo mayoritario y el 10 de diciembre actuar como oposición minoritaria y designar otro integrante". El legislador cuestionó que el Gobierno realice esta maniobra de designar a los camporistas Julián Álvarez y Juan Forlón para la AGN "con una mayoría que el pueblo ya destituyó en la elección".
Por su parte, el diputado nacional por la Coalición Cívica Fernando Sánchez advirtió en comunicación FM Delta que la designación "lo único que hace es restarle votos" al candidato presidencial Daniel Scioli "de cara al balotaje" y denunció que el kirchnerismo busca "impunidad". El legislador alertó que "la sociedad está cansada del atropello" y "viene corrigiendo con su voto muchos defectos de la política", al tiempo que advirtió que los nombramientos "son ilegales" y buscan "impunidad".
Adujo que las designaciones "son indebidas, son ilegales y son arbitrarias". "La decisión que se tomó ayer, violando el reglamento con una mayoría que no corresponde, en una sesión que no correspondía y en un tiempo que no corresponde, implica el arrebatar esos cargos a probablemente otras fuerzas del Congreso Nacional", advirtió. Y argumentó que "se debería haber hecho a partir del 10 de diciembre con la nueva integración de la Cámara de Diputados". "Logran impunidad porque lo de ayer no es sólo que el Frente para la Victoria con La Cámpora a la cabeza arrebató dos cargos en un organismo cualquiera, es el principal órgano de control del Estado nacional", concluyó.
