POLITICA

Sobrevivió a la Dictadura pero no resistió a la interna Puricelli-Garré

Mirta Iriondo renunció a la subsecretaria de Investigación Científica de Defensa.

Puricelli encabezó una caza de brujas, en medio de una cruenta interna con su par en Seguridad, Nilda Garré. Una de las víctimas resultó ser la hoy exsubsecretaria de Investigación Científica y Desarr
| Cedoc.

“La caza de brujas me trae muy malos recuerdos, son conductas que sólo despiertan en mí un enorme desprecio”, escribió la científica Mirta Susana Iriondo cuando presentó su renuncia al cargo de subsecretaria de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico del Ministerio de Defensa. Sus compañeros aseguran que fue “empujada” a presentar su renuncia en medio del escándalo por el embargo de la fragata Libertad en el puerto ghanés de Tema, sumado a la interna entre el jefe de esa cartera, Arturo Puricelli, y la ministra de Seguridad, Nilda Garré.

Pero antes de hablar de “la caza de brujas” desatada por Puricelli, la ahora ex funcionaria fundamentó su renuncia en un hecho puntual: “Lamentablemente no puedo quedarme en este lugar después de que usted señor ministro haya pedido la renuncia, por sospecha de divulgación a la prensa de documentos del Ministerio, a un joven director general a quien aprecio y respeto”. Esa persona a la que Iriondo no nombra es Luciano Anzelini, el ex director General de Planeamiento y Estrategia, recientemente echado.

La renuncia de Iriondo es lapidaria y deja al descubierto la cara oculta de la cartera de Defensa. “Tengo que decirle que en este último tiempo sólo he intentado resistir en este Ministerio, para algunos de nosotros quizás esto sea lo que mejor sabemos hacer”, escribió.

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Sin dudas, el testimonio de vida de esta científica es la resistencia. Tenía veinte pocos de años cuando en abril de 1977 Iriondo fue secuestrada y llevada al campo de exterminio El Vesubio y en octubre del año siguiente fue trasladada a La Perla, otro centro clandestino de detención donde la dictadura se dedicaba a matar. En ambos lugares fue “torturada, vejada y humillada por grupos de tareas militares”.

Durante este último año, según explicó la ex funcionaria en su renuncia, fue “desautorizada ante mandos militares”, “ninguneada por asesores incapaces de la Secretaría de Planeamiento, no sólo desde el punto de vista técnico sino humano e ideológico”. Eso no es todo.

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