Algunos se profesaron amistad, pero “pasaron cosas”. Otras, fueron amigables en pos de una alianza partidaria hasta que una brilló más que la otra. Famosos y políticos argentino que nunca se dirán “!Feliz Día del Amigo!”. Al menos este 20 de julio de 2020.
Elisa Carrió y Patricia Bullrich. Unidas por Mauricio Macri como parte integrante del mejor equipo en cincuenta años, Bullrich al frente de un ministerio; Carrió, con un banca en diputados, y otra fija en varios programas de TN Todo Noticias. Celos de la diputada, dispararon ironías sobre “su verdad” ante, por ejemplo, los decomisos de drogas que hizo la ex ministra. Ni confraternidad de equipo, mucho menos amistad.
Marcelo Tinelli y Sebastián Ortega. Una dupla creativa que aportó a la televisión argentina, títulos de éxito masivo, formas de producir contenido, y un capítulo más a libro del lenguaje popular en la pantalla chica. Luego cierre de un ciclo, y una grieta profunda cuando Tinelli se pone en pareja con Guillermina Valdes, la ex de Ortega.
Mirtha Legrand y Bruno Gelber. Una amistad de años, pasó a fase freezer. El famoso pianista relató el motivo a la periodista Leila Guerriero y terminó convertido en parte de un capítulo de su libro Opus Gelber. Con sutileza y acidez Bruno Gelber dibuja una escena en la que la fama de Mirtha Legrand comparada con la suya queda reducida a prestigio de cabotaje. Algo así como “Chiquita, no te midas conmigo; fuera de Argentina, no existís”. Con mucho humor por cierto.
Mauricio Macri y Carlos Bianchi. Bajo la bandera del mejor club de la Argentina, como es Boca Juniors, Macri como presidente xeneize y Carlos Bianchi como director técnico, acumularon títulos. Pero, el empresario hizo sentir como un mero empleado a un profesional con las suficientes medallas en su chaqueta como para tan poco estratégico destrato. La escena de la conferencia de prensa donde Bianchi deja hablando solo a Macri y se va, fue el broche de oro.
Susana Giménez y Huberto Roviralta. Con su ex parejas, la diva tiene buen trato y la expresión máxima es la relación de amistad y afecto que generó con Ricardo Darín y su nueva familia. Pero Huberto Roviralta cometió la peor afrenta que Susana Gimenez puede tolerar. Y no fue que fuera poco prolijo para manejar ciertas cuestiones físicas. Sino que lo imperdonable fue quedarse -aunque sea legalmente- con dinero suyo en el juicio de divorcio.
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Jorge Rial y Luis Ventura. Una amistad de más de dos décadas donde generaron una marca televisiva con el poder que eso le dio a ambos. Padrinazgos de hijas, secretos, información y relaciones. Hasta que un día, un hecho de la privada de Luis Ventura hizo astillas su alianza de afecto con Jorge Rial. Dolorosa separación de la dupla que formaban en la pantalla de América, y cada uno por su lado.
Mauro Icardi y Maxi López. Decir “Echale la culpa a Wanda (Nara)” sería injusto. Sobre todo porque por más que la separación de la mediática de su primer marido, Maxi López, llenó minutos televisivos y páginas de revistas de corazón, la verdad solamente la saben ellos tres. Lo único cierto es que Mauro Icardi y Maxi López eran amigos hasta que dejaron de serlo. Y ahora Icardi es el marido de Wanda Nara, y según ella dice, hasta es su manager.
Pampita y Nicole Neumann. La rubia y la morocha argentinas. Dos modelos exitosas que se construyeron a sí mismas. El rumor de un apodo dicho de manera despectiva de parte de Nicole hacia Pampita, en los bastidores de todos los desfiles donde ambas coincidían. Un bola que se hizo un alud hasta que en 2019, Carolina invita a Nicole a su programa y pone el tema sobre la mesa. Cuestión saldada en cámara pero si amistad no había en ese momento…para que forzar el surgimiento de una a esa altura de la vida.
Andrea del Boca y Lucía Galán. Un comida de “chicas”, varias a la mesa, y el comentario de Lucía Galán respecto de un hombre que le había resultado interesante. Sumado a un “me voy de viaje” y cuando vuelvo avanzo sobre ese objetivo. Al parecer que se le adelantó fue una de las comensales, Andrea del Boca. A punto tal que ese “objetivo”, Ricardo Biasotti terminó siendo el padre de Anabella, la única hija de la actriz. El derrotero de esa relación llenó más folios judiciales que páginas de revistas. Y entre la actriz y la cantante, ni eso.
