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Columna

Sin salud ni economía

La sociedad argentina está huérfana, en el momento en que necesitaría más orientación aquellos que mandan y deberían orientarla están haciendo su juego egoísta.

Vamos a hablar hoy de la Argentina, que se ha convertido en un país que depende de cifras, cifras que son adversas y nos muestran día tras día un agravamiento de la situación.

Una de las cifras es clásica en nuestra historia, que es el valor del dólar paralelo. La otra es nueva, que son la cantidad de infectados diarios y también de muertos por el VIH. Ninguna de las dos están favoreciendo al país, evidentemente. Esta semana hemos tenido récords. Llevó el país a un millón de contagiados. Y por otro lado, se pagó 180 pesos por cada dólar, configurando una situación tanto sanitaria como económica difícil de sostener.

¿Qué pasa mientras tanto con nuestras élites, con los responsables de conducir a la sociedad? Bueno, pareciera que como en el al Don pirulero, cada cual atiende su juego y con esa actitud empeora la situación, porque lo necesitamos son conductas cooperativas y lo que se están viendo son conductas en realidad defensivas.

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Es falso que el dólar blue no refleje necesariamente la realidad argentina

Un ejemplo significativo de esta defensa individual de los intereses ha sido la aparición en los medios del ex presidente Mauricio Macri en su raid mediático, combinó corrección política, combinó victimización, cuestionó a valiosos dirigentes de su coalición por un supuesto fracaso durante su gobierno y también tuvo una actitud perdonavidas cuando dijo que no era necesario un parricidio, refiriéndose también, irónicamente, a los dirigentes de la oposición que están creciendo en la consideración de la opinión pública.

Urge el tiempo en la Argentina. Urge resolver los problemas porque estamos en una situación económica crítica, pero también sanitaria muy preocupante. Además, en un mundo que parece carente de claridad para salir de las dificultades que se presenta. La sociedad argentina está huérfana, en el momento en que necesitaría más orientación, se encuentra que aquellos que mandan y deberían orientarla cada uno está haciendo su juego egoísta.