A raíz de la crisis económica del país, el Hot Sale es una buena forma para que los pequeños y medianos comerciantes puedan remontar sus ventas. Sin embargo, hay que tener cuidado a la hora de lo que se ofrece y lo que se compra.
En una entrevista con RePerfilAr, el vicepresidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, Fabian Tarrío, explicó: “En general la venta está deprimida absolutamente, aún con los impulsos que se le puede dar, como cualquier campaña de comercio electrónico o cualquier otra metodología”.
Luego añadió que “hay que adaptarse a los nuevos tiempos porque aunque el comercio no venda por un medio electrónico, tiene que por lo menos estar en las redes para que esa sea su vidriera de ahora, no la de siempre que también está bien que siga”.
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Al momento de las ofertas y descuentos, las grandes cadenas tienen una ventaja: “Las marcas venden desde la fábrica directamente, y el comercio minorista batalla con los que puede, le cuesta mucho porque tiene la misma carga impositiva que tiene cualquier gran empresa, hay 166 impuestos entre municipales, provinciales y nacionales que agobian a las pymes”, expresó Tarrío.
