A un año de la muerte de Fernando Báez Sosa, los padres del joven solo quieren justicia por el cobarde asesinato de su hijo. Fernando tenía solo 18 años y murió luego de una brutal golpiza efectuada por cinco rugbiers que le provocó un paro cardíaco a raíz de un traumatismo de cráneo.
La causa hoy por hoy se encuentra en etapa intermedia luego de las pruebas conseguidas por la fiscal Verónica Zamboni. “En base a los elementos que se encontraron pedí un juicio oral, la defensa hizo su descargo y el juez decidirá si la causa irá a juicio o no“, aseguró Diego Escoda, el fiscal de Dolores que lleva la causa. Asimismo, el fiscal aseguró que hay 8 imputados en la causa: Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Blás Cinalli, Ayrton Viollaz, Lucas Pertossi y Luciano Pertossi.
“A todos los imputados les cabe la misma pena de homicidio culposo agravado por alevosía”, aseguró Escoda. El eventual juicio se realizaría con jurado, lo cual es poco conveniente para la familia del joven asesinado dado que si uno de los doce miembros del tribunal considera que la pena perpetua no es correcta, se catalogará el hecho como un homicidio simple, reduciendo la eventual pena a entre 8 y 25 años de prisión.
