Una mujer de 44 años que había pedido una licencia especial de su puesto en el Banco Central para cambiarse de sexo, no quedó conforme con los resultados de la operación y amenazó con realizar una masacre en la entidad financiera.
Las intimidaciones las envió a través de los grupos de WhatsApp y Facebook en los que había quedado conectada con sus compañeros y las capturas de pantalla de esos mensajes fueron las que presentó el gerente de seguridad de la entidad para iniciar una investigación. "Estoy re mal, próximamente se viene una masacre que se podía haber evitado", decía uno de los textos que trascendió.
"Al final no me dieron la licencia así que se viene una masacre en el Banco Central de la República Argentina. Como se van a equivocar, directamente al que se equivoque lo mato" escribió la mujer en sus redes sociales, en alusión a un pedido que había realizado al aducir que tenía problemas psiquiátricos, según consignó el diario Clarín. Otra de las intimidaciones precisaba: "Muchos van a morir, otros van a quedar tan pero tan hechos mierda que les voy a cagar la vida".
Inicio de la investigación. El 12 de abril, luego de una denuncia presentada por el Gerente de Seguridad del banco, en la que se mencionaba el contenido de los estados WhatsApp y Facebook, se dio inicio a una investigación judicial.
Facebook fue clave para los investigadores, dado que en el perfil de la mujer, se veían algunas fotos que también anunciaban un final trágico: por ejemplo, una de ellas mostraba decenas de balas sobre un mapa; mientras que en otra se veía un plato de comida, una copa de vino y un revólver de fondo.
Detención. El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 1, a cargo de María Romilda Servini, ordenó el allanamiento del departamento donde vivía la mujer, ubicado en el barrio de Núñez.
Allí se secuestró una pistola Bersa calibre 380, algunos cargadores y cartuchos de bala, una navaja, un celular, dos computadoras y documentación de interés para la investigación. Por disposición judicial quedó detenida, pero horas más tarde recuperó su libertad.
