Este lunes 31 de diciembre se celebra el final del 2018 y, como es costumbre, el 2019 se recibirá con fuegos artificiales, que cada vez son más cuestionados por los daños que generan a los animales.
Así como en el 24 de diciembre en la Navidad, el último día del año es uno de los más traumáticos para muchos de los perros que sufren la pirotecnia al tener un oído mucho más desarrollado que el humano.
Es por eso que se recomienda una serie de cuidados para que en dichos días se cuiden lo más posible a las mascotas. Los perros pueden mostrar los síntomas de temblar, babear, taquicardia, esconderse o salir corriendo, entre otros.
En primer lugar, la veterinaria Amanda Peres recomendó que para cuidar al perro se quede en un ambiente donde las ventanas estén cerradas y tapadas, para tratar de disuadir lo más posible los ruidos y que tampoco puedan ver los destellos, ya que estos también alteran a los animales.
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Ese ambiente tiene que ser lo más ameno posible, es decir, que tenga música o al menos una televisión prendida que distraiga al can. A su vez, que no sea un ambiente del que el perro pueda generar daños ni salir corriendo. Y es importante que el dueño no lo deje sólo encerrado al perro.
No obstante, tampoco se recomienda que la forma de acompañar al can sea alzarlo o tratarlo como un bebé, ya que el lenguaje puede transmitirle miedo o inseguridad. "Incluso si el perrito salta y pide que lo cargues, se aconseja no alzarlo, ya que puede ser entendido por él como una señal de inseguridad. Siempre es mejor mostrarse natural, y que todo está bajo control y hacerle saber que está protegido", aseguró la especialista en salud animal.
J.D. / C. P.
