Adelanto del operativo frío, apertura de instalaciones para personas en situación de calle, y la obligación de realizar aislamiento preventivo para quienes quieran ingresar a los mismos, son algunas de las medidas de asistencia social que puso en marcha esta semana el Gobierno poteño, en el marco de la cuarentena por la pandemia de coronavirus.
Entre las principales medidas puestas en marcha por el gobierno, figura la decisión de adelantar y reforzar el Operativo Frío, que se implementa todos los años en la ciudad de Buenos Aires para atender a las personas que están sin techo. El objetivo es hacer un abordaje integral para que ninguna persona situación de calle quede sin la debida atención que necesita. Sin embargo, y pensando en las personas que decidan no ingresar a un CIS, los móviles de Buenos Aires Presente (BAP) les acercarán una vianda caliente; un kit de vianda seca cuando la temperatura sea menor a 10º; una frazada y otro equipo de indumentaria para soportar las bajas temperaturas como guantes, medias, cuello polar y gorros.
Según datos del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, actualmente unas 1150 personas se encuentran en situación de calle. Mientras que para Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) el número llega a las 7.251 personas en esta situación, según el Segundo Censo Popular realizado por esa entidad en abril del año pasado. “Las personas sin hogar son un grupo especialmente vulnerable en el marco de la pandemia. Del número total que manejamos unos 5400 no tenían accesos a paradores del Gobierno. Duermen en la calle y muchas de ellas tienen afecciones respiratorias”, aseguró Rosario Fassina coordinadora del Derecho a la Ciudad de ACIJ. “Más allá de la apertura de paradores, las plazas no alcanzan. Pero para el Gobierno, que cuenta solo 1100, de acuerdo a su metodología de censo, es necesario que se implementen políticas públicas a largo plazo que den una solución integral a esta población”, agregó.
A través de una video conferencia, de la que también participó Perfil, María Migliore, titular de ese ministerio porteño afirmó que "debimos adecuar las iniciativas al distanciamiento social obligatorio, por eso abrimos un dispositivo específico para aislamiento en el Parque Roca para los nuevos ingresos y generamos una nueva metodología para reemplazar las cocinas de campaña y llegar con alimentos calientes, elementos de higiene y ropa de abrigo, sobre todo en los días más fríos."
Menos actividad, más control: cómo sigue la cuarentena en Ciudad de Buenos Aires
También está contemplada la realización de operativos extraordinarios para los días de clima polar, es decir, cuando la temperatura sea igual o menor a 5º. Llegado ese momento, se realizarán 40 recorridos con 40 móviles en las zonas identificadas con mayor densidad y se entregarán viandas calientes que, como consecuencia de la pandemia de coronavirus, no contemplarán la mecánica de cocina de campaña para evitar las aglomeraciones.
Otra de las medidas de asistencia para las personas en situación de calle, fue la apertura del nuevo Centro de Inclusión Social (CIS) "Roca III", que incluirá un sector para que todas las personas que ingresen a la red de CIS de la Ciudad puedan realizar un aislamiento preventivo durante los primeros 14 días de llegados al lugar. En este sentido, cabe señalar que solo se admitirán a personas o grupos familiares que previamente hayan sido contactados a través de la Linea 108. Quienes ingresen allí, tendrán espacios diferenciados para que hombres, mujeres y familias para que puedan aislarse de manera preventiva. La Ciudad tiene habilitados 40 paradores en total que permanecen abiertos las 24 horas.
Con este nuevo parador, además de ser un lugar de aislamiento, se incrementa la capacidad en hasta 250 camas llegando a un total de 3.379, lo que significa que se suman 1.280 plazas que a las 2.099 permanentes. Asimismo, se abrieron dos centros adicionales exclusivos para adultos mayores con 142 camas. La última semana de mayo, en tanto, se habilitó el Centro Costa Salguero con 700 plazas disponibles para derivar a aquellas personas positivas de COVID-19, con síntomas leves. Previamente, los casos positivos habían sido destinados a los hoteles que la Ciudad destinó al manejo de la pandemia para casos leves.