Sólo en las cuatro villas más pobladas del área metropolitana viven más de cien mil personas. Se trata de la 31 y 31-bis de Retiro, donde viven 26.492 personas; la 20 de Villa Lugano, donde hay 19.195 habitantes; la 1-11-14 de Bajo Flores, con 25.973; y la 21-24 de Barracas, donde viven 29.782. La población allí, que ni siquiera es el total de la población que habita las villas y asentamientos de la ciudad es cinco veces la población de ciudades del país como El Calafate, en Santa Cruz, por ejemplo, donde la población total no supera los 20 mil habitantes, según el último censo. O más de ocho veces Tilcara, en Jujuy, donde la población es de 12.349 personas.
En los últimos treinta años la población en las villas de la Ciudad creció de manera sostenida, pasando de 34.068 habitantes en 1980 a 52.608 en 1991, luego a 107.422 en 2001 y a 163.584 en 2010, según los últimos datos oficiales. Este último número representa el 5,7% de la población de toda la ciudad. Según se estima, hay 15 villas, dos villas urbanizadas, 24 asentamientos y dos núcleos habitacionales transitorios.
Según datos del Instituto de Políticas de Planificación (IPP), el mayor segmento de personas que vive en las villas son los menores de edad de entre 6 y 14 años, que representan un 20,2% de esa población; seguido de un 20,1% del rango etario que va de los 30 a los 45 años. Los adolescentes de entre 15 y 18 años representan el segmento menor, del 9,5%. A su vez, de los jefes de hogar, el 83% tiene estudios iguales o inferiores al de secundario incompleto y el 37% son trabajadores informales. En este sentido, si bien la mayoría de los habitantes de las villas es gente de trabajo, sólo un porcentaje menor lo hace de manera formal. En tanto, el 48% de las personas que habitan las villas son porteños, mientras que el 17% viene de otras provincias, y el 32% lo hace desde países limítrofes. Sólo el 2% es de países no limítrofes.
