Al menos cuatro de las seis ciudadanas rusas embarazadas que fueron inadmitidas por Migraciones y quedaron demoradas en dependencias del Aeropuerto Internacional de Ezeiza fueron habilitadas a ingresar a la Argentina, luego de que el juez federal de Quilmes Luis Armella se expidiera favorablemente en el habeas corpus presentado en favor de ellas por el abogado Christian Rubilar.
En la sentencia, que se dictó ayer después del mediodía, Armella dispuso que ingresaran al país por cuestiones humanitarias y que fueran atendidas de inmediato por un médico para corroborar su estado de salud. En este sentido, una de las mujeres había comenzado con el trabajo de parto, por lo que habría sido llevada a un hospital zonal.
“La sentencia fue favorable a las ciudadanas rusas. La Justicia habilitó el desembarco provisorio de las mujeres, de esta manera se separa el ingreso al país de lo que pasará con ellas con la documentación que obtengan. También se ordenó que un médico evalúe su estado de salud”, aseguró el letrado en su charla con PERFIL. “Con esta sentencia favorable, la idea es que no vuelva a ocurrir nunca más esta situación de retener a mujeres embarazadas en condiciones inhumanas. Mis clientas tienen pensado quedarse”, agregó Rubilar.
Según el abogado, “con esta sentencia se puedo acreditar que el criterio de admisibilidad aplicado por Migraciones es que si vienen treinta matrimonios con mujeres embarazadas no hay problemas porque vienen acompañadas por sus maridos; si vienen hombres solos, tampoco hay problemas, pero si entra una mujer embarazada y sin un hombre, la retienen. Tratar de ingresar solas, sin un hombre para Migraciones es sospechoso, retrocedimos mil años”, aseguró el abogado patrocinante.
Tres de las mujeres demoradas en Ezeiza llegaron al país en un vuelo de Ethiopian Airlines y fueron retenidas por Migraciones ya que, según ese organismo nacional, presentaron irregularidades en su documentación y habrían mentido al momento de querer ingresar a la Argentina, por lo que fueron declaradas como “falsas turistas”.
La directora nacional de Migraciones, Florencia Carignano, por su parte, aseguró que la inadmisión de las seis ciudadanas rusas embarazadas responde al habitual procedimiento administrativo para resolver casos sospechados de mentir y de ser “falso turista”, y advirtió, además, esto se da en el marco de una investigación judicial sobre bandas “delictivas”.
Según precisó la funcionaria, las ciudadanas rusas que están “inadmitidas” para ingresar al país vinieron solas, “todas en la semana 33 o 34 de embarazo, y todas dijeron que venían a hacer turismo”.
“Cuando vemos que no tienen pasaje de regreso, que no saben explicar dónde van a hacer turismo, algo que es raro para una embarazada de 34 semanas, sospechamos que no vienen a hacer turismo. En estos casos se detectó que era falso turismo, porque ellas mismas admitieron que vienen a tener sus hijos a la Argentina”, aseguró Carignano a la agencia Télam.
Las autoridades migratorias deben regirse con “un procedimiento para la resolución de casos ante la sospecha fundada de falso turista”, tal como funciona “en todos los países”, explicó Carginano. La funcionaria explicó que “no es un delito” venir a tener un hijo al país, pero las personas “de nacionalidad extra Mercosur” deben “ir al consulado y sacar una visa y explicar los motivos”. Y las ciudadanas rusas inadmitidas entre el jueves y ayer no tenían esos papeles requeridos.
Por otra parte, la funcionaria nacional advirtió sobre la presencia de “abogados que son parte de bandas que están siendo investigadas en Comodoro Py”, en los tribunales federales.
“Hay una investigación judicial que está detrás de estas bandas que traen a mujeres y hombres, y atrás hay un negocio millonario”, confirmó.
Sobre estas organizaciones delictivas, Rubilar afirmó que “las personas quieren asesorarse correctamente en Rusia para emigrar hacia la Argentina, pero existe un falso gurú que les cobra hasta 500 dólares la consulta y les dice que las mujeres tienen que embarzarse. Ofrece tres paquetes, uno de ellos de 15 mil dólares. Su promesa es que al llegar al país las mujeres obtienen la ciudadanía de manera exprés. Y eso es falso”, concluyó.
