El Metrobus del Bajo será el único con estaciones laterales

Luego de tres años de idas y vueltas no exentos de polémicas, las obras del futuro Metrobus del Bajo tienen luz verde. Se convertirá en el séptimo sistema de carriles rápidos para pasajeros, y será el que más gente transportará: sobre el futuro Metrobus, que se instalará sobre el corredor Leandro N. Alem, Paseo Colón y Almirante Brown, circularán treinta líneas de colectivos, que transportan a unas 300 mil personas por día.
Se presume, además, que con su puesta en funcionamiento el tiempo de viaje se reducirá en un 30%. De acuerdo al master plan, la primera etapa de construcción comenzará en octubre y su finalización se prevé para marzo de 2017. En total, el Metrobus recorrerá 4,8 kilómetros para unir Retiro con La Boca.
La otra novedad que introduce esta obra es el diseño de sus estaciones: a diferencia de los refugios del Metrobus 9 de Julio, los 43 nuevos paradores incluyen áreas especiales con  espacios verdes y se ubicarán en los laterales de los carriles, y no en el centro de las avenidas.
Resistencia. De todas maneras, y más allá de los beneficios que representaría su puesta en marcha, la iniciativa se vio envuelta en una fuerte polémica con los vecinos de San Telmo. Las diferencias giraban en torno a las expropiaciones que debían encararse para ensanchar la avenida Paseo Colón.
Entre los inmuebles afectados por la traza se encontraban el edificio Marconetti –que estaba tomado–, y el ex centro clandestino de detención Club Atlético. En este último caso, que levantó más polvareda, el gobierno porteño aclaró que no lo modificarán ni trasladarán. Para resolver esta situación, se implementó un carril para que los autos giren hacia la subida de la Autopista 25 de Mayo.
En el caso del edificio ubicado en Paseo Colón al 1500, se llegó a un acuerdo con la mayoría de los ocupantes para ser reubicados. Otros edificios afectados por el futuro Metrobus son un centro cultural, una sede del Indec, un predio deportivo del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), la Escuela Taller del Casco Histórico, y el colegio Isauro Arancibia. En estos casos, y según la Secretaría de Transporte porteña, el acuerdo llegó de la mano de diferentes relocalizaciones consensuadas con los habitantes de esos inmuebles.
“La idea de esta nueva obra es ampliar las alternativas de transporte en la Ciudad, promoviendo la intermodalidad y reordenamiento del tránsito”, aseguró Juan José Mendez, titular de la Secretaría de Transporte porteño.