Los marinos del rompehielos Almirante Irízar rindieron honores a sus pares desaparecidos del submarino ARA San Juan, del que no se sabe nada desde el 15 de noviembre pasado.
Los navegantes se reunieron en el hielo polar ubicado en la zona más austral del planeta formando un 44, con sus uniformes naranjas, para realizar la venia del tradicional saludo militar.
El ritual sucedió una vez que el navío llegó al continente antártico, donde debió abastecer a 13 bases argentinas, permanentes y temporales. La Armada publicó, a través de la red social Twitter, una fotografía del gesto de los tripulantes que fue tomada desde el helicóptero que acompañó al Irízar.
El navío arribó a la Base Permanente Belgrano 2, la más austral que la Argentina tiene en la Antártida, luego de diez años, dejando atrás el incendio que casi lo destruyó por completo en abril de 2007 y que lo alejó de las tareas que se llevan a cabo en el polo sur.
En cuanto al submarino desaparecido continúan las búsquedas conjuntas con el navío ruso Shakhtar, mientras que la semana pasada los familiares de los tripulantes se reunieron con el Ministro de Defensa, Oscar Aguad, quien prometió cambiar las políticas de búsqueda y seguir buscando la embarcación, luego de cumplirse más de dos meses de la ultima comunicación del ARA San Juan.
