El papa Francisco autorizó hoy la canonización del Cura Brochero. La aprobación se hizo tras haber confirmado el segundo milagro atribuido a su obra, por lo que se convertirá en el primer santo nacido y muerto en Argentina.
Su Santidad permitió a la Congregación de las Causas de los Santos a publicar el decreto que aprueba el segundo milagro que s ele atribuye a Brochero. Es el caso de una niña que se recuperó de lesiones que la habían dejado al borde de la muerte, según informó la agencia Télam.
En septiembre de 2015, una junta de siete médicos determinó que "no hay explicación científica" en el caso de la niña de San Juan, Camila Brusotti, recuperada de múltiples heridas que derivaron en un infarto masivo en el hemisferio cerebral derecho.
De esta manera, se determinó su "segundo milagro" y se dio por cumplido el primero de los cuatro pasos que se necesitan para que el cura Brochero ser declarado santo. El primero fue el de Nicolás Flores, quien revirtió un cuadro inicial de posible "vida vegetativa" tras un accidente.
En noviembre de 2015, el proceso de canonización del beato argentino fue analizado por una junta de teólogos que certificó la "intercesión" del religioso en el suceso, es decir que el milagro alegado se realizó efectivamente mediante oraciones a él y no mediante oraciones simultáneas dirigidas a otro santo ya establecido.
José Gabriel del Rosario Brochero (1840-1914) nació en Villa Santa Rosa, Córdoba. Fue sido declarado “venerable” por Juan Pablo II en 2004 y luego beatificado por Benedicto XVI a fines de 2012, pese a que el inicio de su causa había sido autorizado ya en 1967.
El primer santo oficializado por el Vaticano y nacido en Argentina es San Héctor Valdivielso Sáez, también conocido como San Benito de Jesús (1910-1934), que a los cuatro años fue llevado por sus padres a España donde fue ejecutado durante la Revolución de Asturias, previa a la Guerra Civil Española.