La triste historia de abandono de dos abuelos parece dar un vuelco positivo. Tras la noticia de que un matrimonio de adultos mayores fue dejado por uno de sus hijos en un bar de Rosario luego de haber sido desalojados de su vivienda por no pagar el alquiler, cientos de personas se conmovieron con el hecho y les ofrecieron colaborar con un lugar para poder vivir, ropa y comida.
El miércoles 5 de junio, Hugo de 92 años, e Hilda de 86, debieron dejar la casa que habitaban dado que la inmobiliaria les había pedido el lugar porque debían devolverlo a los dueños. El hijo del matrimonio era quien se encargaba de pagar el alquiler aunque, por lo visto, no lo hacía. Ese mismo día el hombre llevó a sus padres a un bar de Rosario, los dejó allí en taxi, con algunas bolsas con pertenencias y algo de dinero.
Con el correr de las horas los empleados del local gastronómico ubicado en las calles 27 de Febrero y Corrientes de esa ciudad, se dieron cuenta de que algo no andaba bien y el encargado se acercó a hablarles. Allí, la mujer les explicó que esperaban a su hijo quien les prometió que volvería a buscarlos pronto. Ante esto, personal del lugar alertó a la Policía para que los ayudara a rastrear al familiar, y lo que pudieron hacer desde allí es dar con el paradero de otro de los hijos, según consignó el medio local La Capital.
Rosario: abandonan a dos abuelos en un bar y la Policía tuvo que buscar a su hijo
Raúl González, el hijo del matrimonio que fue contactado por los agentes y quien vive con su esposa y cuatro hijos, aseguró que apenas las autoridades le avisaron sobre el episodio, se dirigió a la dependencia policial. A su vez detalló que al tomar estado público, no deja de recibir ofrecimientos donde personas de diferentes puntos de la Argentina quieren ayudar a los ancianos. "Me llegaron innumerables mensajes. Aproximadamente 160 de ellos ofrecen un lugar para que mis padres puedan vivir".
En ese sentido, el hombre contó también que dos de sus hijos "se fueron a otro lado para momentáneamente dejarle lugar a los abuelos". Y completó: "Una familia de Tigre me ofreció una casa con dos dormitorios hasta que podamos conseguirles algo permanente".
Más solidaridad. Las redes sociales del mencionado medio también se vieron desbordadas de mensajes de gente que, conmovidos por el caso, decidieron hacer llegar su ofrecimiento a los abuelos para darles una vivienda. Uno de ellos sostenía: "Puedo ofrecerles la habitación de mi nena a los abuelos, ¿con quién tengo que hablar?"; mientras que otro aseguró: "Yo quiero colaborar. Tengo un lugar, y quisiera comunicarme con los abuelos".
Por otra parte, aún no se pudo dar con el hijo que abandonó a Hugo e Hilda en el bar.
F.D.S./F.F.
